La Constitución Nacional expresa en su artículo 5 que la soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce de manera directa e indirecta a través del sufragio. Es la población a quien le corresponde decidir el futuro de la nación. Los funcionarios electos por los venezolanos tienen el deber de respetar no solo al Estado de Derecho, sino también la voluntad popular, trabajando incansablemente para el desarrollo y progreso social de Venezuela.
Los venezolanos gozamos de valores democráticos y cívicos porque sabemos que la democracia es el sistema político más justo y estable, donde los derechos y libertades de los ciudadanos son respetados. Queremos recuperar la democracia en Venezuela porque las instituciones deben funcionar para resolver los problemas de las personas, y a su vez, la separación de poderes evita que existan autoritarismos capaces de vulnerar a las personas y cometer injusticias.
El buen recibimiento que han tenido las venideras elecciones regionales y municipales, es producto de ese sentimiento. A pesar de la situación política y social del país, 431.122 personas se inscribieron en el registro electoral, hubo un total de 134.245 personas que actualizaron sus datos, y 824.656 que cambiaron de centro de votación. Estos números son reflejo de lo que queremos los venezolanos: una salida pacífica y democrática a la emergencia humanitaria compleja que padecemos. Estamos cansados del hambre, la miseria, las injusticias, el autoritarismo y el matraqueo. Por eso estamos decididos a ocupar todos los espacios posibles para luchar contra el régimen y su corrupción que tanto daño ha causado. No vamos a quedarnos de brazos cruzados mientras ellos siguen enriqueciendo sus bolsillos. Vamos a recuperar a nuestro país dando batalla.
El venezolano está tranquilo con su consciencia votando, porque es una herramienta de lucha para demostrar su descontento con la situación nacional. El voto permite demostrar cual es el destino que queremos como país, porque en elecciones somos los venezolanos quienes deciden sobre qué rumbo tomar.
El voto no es excluyente de otras formas de lucha, como algunos quieren hacer ver. Ejercer nuestro derecho al voto es en realidad una de las tantas formas de dar batalla que tiene la ciudadanía para ejercer presión contra el régimen, que puede ser llevado a cabo junto a otros mecanismos como la protesta pacífica. En realidad, mientras más formas de presión ejerzamos, más fuerte se vuelve nuestra causa.
Por este motivo, no dudo en afirmar que los venezolanos no planeamos rendirnos ante aquellos que tanto daño han causado a nuestro país. Vamos a recuperar todo lo que nos arrebataron: la libertad, nuestra democracia y nuestros derechos. Vamos a reconstruir Venezuela y lograr el cambio que todos queremos. Muy pronto tendremos una nación con oportunidades y calidad de vida para todos, donde podamos escoger nuestro futuro.