El anuncio de aumento salarial de 300 mil bolívares -150 mil bolívares de salario mínimo y 150 mil de bono de alimentación– hecho por la administración de Nicolás Maduro no solo dejó dudas porque fue realizado por el diputado Francisco Torrealba a través de Twitter, con una Gaceta sin fecha, y que en su texto no reflejaba la noticia en materia salarial.
El incremento también llega en una fecha en la que el gobierno de turno debe presentar el presupuesto de la nación ante la Asamblea Nacional, lo cual no hacen desde hace tres años.
La directora general del Centro de Documentación y Análisis para los trabajadores (Cendas), Ylda Mora, señaló que con los datos que recopilaron en el mes de septiembre, donde la canasta alimentaria se ubicó en 3.974.390 bolívares, sin agregar la inflación del mes de octubre, el poder adquisitivo de dicha canasta pasaría de 1,1% a 4%.
Indicó que el salario está muy distante a los de otros países de la región, considerando los niveles de inflación de Venezuela. Es deprimente que la población trabajadora esté prácticamente sobreviviendo con los ingresos que gana.
Según el Banco Mundial, un individuo se encuentra en situación de pobreza cuando gana menos 1,9 dólares diarios. Con el salario mínimo correspondiente a 150 mil bolívares, sin sumar los 150 mil de bono de alimentación, el ingreso diario de quienes perciben este sueldo sería de aproximadamente 26 centavos de dólar.
El economista y profesor universitario, Ronald Balza, explicó que se está realizando una violación sistemática de la Ley Orgánica de la Administración Financiera del Sector Público del 19 de noviembre de 2014, que dice que el proyecto de Ley de Presupuesto será presentado por el Ejecutivo Nacional a la Asamblea Nacional antes del quince (15) de octubre de cada año.
Criticó que se realiza un aumento en medio de una opacidad y secretismo, puesto que en la ley deben aparecer todas las metas no solo con el destino del gasto sino de la economía en general. Esto no se ha presentado en los últimos tres años, no aparece la distribución presupuestaria. Es algo de lo que no se habla al momento de analizar esta medida y en la fecha en que se hace, acotó.
Balza agregó que ya los venezolanos tienen una gran experiencia en este tema de aumentos e hiperinflación. Destacó que sobreviven quienes tienen ingresos en divisas, que son muy pocos y han disminuido su consumo, y los que no, sucumben.
El dirigente sindical, Froilan Barrios, reveló a HispanoPost que con la diáspora y deserciones laborales en los últimos tres años, el número de trabajadores públicos en Venezuela disminuyó de 4 millones a 2 millones 600 mil aproximadamente, de los cuales alrededor del 70% gana sueldo mínimo.
Hay que aclararle a la gente que no se puede dejar engañar, el nuevo salario mínimo es de 150 mil bolívares, los otros 150 son de bono de alimentación y no se toma en cuenta al momento de aguinaldos y prestaciones sociales, explicó.