El 2024 y la promesa de un nuevo proceso electoral, en el que se debe elegir al próximo mandatario nacional, están cada vez más cerca; aunque pareciera que no hay apuro, para la oposición, esta fecha sí debería suponer presión.
Pese a las distancias evidentes entre los partidos que conformaban el «G4», que representaban a su vez al llamado gobierno interino, tanto Primero Justicia, como Voluntad Popular, Un Nuevo Tiempo y Acción Democrática, han ido arrojando al camino semillas de reconciliación para fortalecer la casi extinta Plataforma Unitaria, que se popularizó y logró aglutinar a casi todas las organizaciones que adversan a Nicolás Maduro desde 2015.
En el pasado reciente, los proyectos infortunados e intereses particulares fueron segregando a los partidos; además, de los inconvenientes que suponen la inhabilitación por parte del Tribunal Supremo de Justicia, designado por Maduro, para presentar un candidato que sea abanderado por dichas tarjetas.
En esta oportunidad, cada organización busca por su cuenta organizarse, para movilizar a su militancia, una vez que sea dada la voz de acción para iniciar la carrera hacia la escogencia de un o una aspirante unitario que se mida en 2024, contra el designado por el oficialismo. Aunque cada quien también ha hablado de expandir los brazos de la oposición y dar cabida a todos aquellos partidos que, anteriormente, eran rechazados por sus similares.
«Debe ser una primarias inclusivas. Donde se inscriban todos los que tengan el sueño de ganarle a Nicolás Maduro», dijo hace un mes aproximadamente, el dos veces candidato presidencial, Henrique Capriles Randonski.
Por su parte, a finales de julio se conoció un supuesto proceso de negociación y reconciliación entre las dos fracciones de Acción Democrática (AD), por lo que, Edgar Zambrano, primer vicepresidente de la AD afín a Henry Ramos Allup, informó que tienen planificado inscribir un candidato propio, que será electo por consenso de los adecos; no obstante, Carlos Prosperi, ha convertido esa candidatura en un secreto a voces desde principios de año.
Lo que viene
Aunque aún no se ha definido una fecha definitiva para las elecciones primarias de la oposición, el 16 de mayo pasado, la coalición anunció que éstas podrían ser realizadas el último trimestre de 2023, mientras tanto los partidos aprovechan de organizarse y mostrar a sus mejores fichas para que el ciudadano les ofrezca su confianza.
En Primero Justicia (PJ), este fin de semana, se llevará a cabo el comité político donde se anunciará las nuevas autoridades nacionales de la organización y tras este proceso, realizarán un congreso programático donde dictaran las líneas políticas de la militancia de cara a un eventual triunfo en 2024.
Tomás Guanipa, secretario general nacional de PJ, señaló que «queremos contarle al país nuestra idea, lo que tenemos preparado para el país de llegar al gobierno junto a la unidad y después vamos a escoger a una o un justiciero para que nos represente en unas primarias y así poner al servicio del país a Primero Justicia como un motor de cambio y de transformación de Venezuela».
Por su parte, Un Nuevo Tiempo (UNT) está adelantando su proceso de legitimación de bases para formalizar su participación en la contienda electoral y como uno de los principales partidos de la oposición. Esto se llevará a cabo el próximo 2 de octubre, en todos los municipios y parroquias donde haya representante de la tolda azul.
Jaime Rodríguez, secretario operaciones de UNT Miranda, dijo que «en toda la geografía de Miranda, particularmente, nos hemos integrado a la Plataforma Unitaria. Estamos trabajando y promoviendo las primarias, se están haciendo las reuniones y ayudando a formalizar la normativa que se va a aplicar durante las primarias, indudablemente con la intención de lograr que ese proceso se dé el año que viene».
Otra tolda política que ha ganado espacios recientemente, pero que no era bien vista en el pasado cercano, es Fuerza Vecinal. La organización más joven con alcance nacional que ha albergado a un gran número de opositores que han renunciado a los partidos convencionales de la oposición y que cada vez hace más ruido entre la ciudadanía, exponiendo la cara de sus principales representantes.
Estos no son otros que los tres alcaldes metropolitanos mejor ponderados: Gustavo Duque (Chacao), Elías Sayegh (El Hatillo) y Darwin González (Baruta), éste último el menos presidenciable, a juicio, de los electores.
En este particular, Máximo Sánchez, miembro de la dirección nacional de Fuerza Vecinal (FV), acotó que dicha tolda fue una de las primeras en proponer elecciones primarias en la oposición: «unas primarias que se diferencian de otros planteamientos, porque están ideadas para que participen todos los sectores donde hacen vida los venezolanos. Donde podamos elegir a un candidato único, más que unitario».
Detalló que el partido se encuentra en la etapa de estructuración de equipos. «Tenemos cerca de 10.000 personas inscritas en FV, presencia en 100% de los estados y 70% de los municipios. Tenemos liderazgos locales y por eso nuestra fuerza está en los alcaldes, concejales y diputados regionales, de lo cual podemos desprender que cualquiera de ellos que ponga su nombre a la orden para avanzar en este proceso de primarias, podrá contar con el apoyo de Fuerza Vecinal».