Culminada la Conferencia Internacional sobre Venezuela, llevada a cabo el 25 de abril en Bogotá, Colombia, las piezas del tablero de ajedrez salen del letargo y colocan en la lista tres objetivos ya conocidos, pero discutidos dentro de una realidad diferente, señala el semanario Exclusivas Económicas.
Gustavo Petro, presidente de Colombia, es quien empuja las fichas buscando su propia conveniencia. Ahora bien, ¿qué tanto necesita Nicolás Maduro una negociación con la oposición y Estados Unidos?, pregunta el semanario.
Sin cifras oficiales, pero con el trabajo estadístico del Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), se conoció que la contracción económica fue de -8,3% en el primer trimestre, un duro golpe para la narrativa de Maduro de que «Venezuela se arregló», advierte el semanario.
Si bien los ingresos que proporciona el acuerdo con Chevron están presentes hoy, no son suficientes y hay pocas expectativas de que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) pueda revertir su precaria situación.
Además, según Exclusivas Económicas, Pedro Tellechea, presidente de la estatal petrolera y ministro de Petróleo, no tiene el roce gerencial que sí tenía Tareck El Aissami y ha estado lidiando con una reconstitución de la gerencia de Comercio y Suministro que no se le ha hecho sencilla en vista de las sanciones económicas que enfrenta la empresa y sus consecuencias operativas.
Por otro lado, los estragos sociales dejados por la devaluación y la inflación -controladas gracias a los recursos de la petrolera estadounidense- se perciben claramente en la caída del consumo. Sin embargo, los precios no han retrocedido, solo se detuvo la espiral.
Maduro necesita recursos, señala el semanario, para enfrentar una campaña electoral y sabe que sus canales de comunicación con el país están rotos. Hay un desinterés por la política y los medios de comunicación censurados y autocensurados han disminuido sus audiencias. Es así como el aparato mediático del gobierno no llega a grandes masas.
Asimismo, las redes comunitarias no funcionan como antes y el golpe que ha representado su «lucha anticorrupción» tiene un aspecto que llama la atención. Tareck El Aissami contaba con unas redes en todo el país que han sido desarticuladas y no debe ser subestimado a la hora de pensar en una reorganización de fuerzas del PSUV, indica la publicación.
De acuerdo con Exclusivas Económicas, Maduro sabe que la oposición dividida es un triunfo seguro para su proyecto y de allí que estaría dispuesto a dar al menos las condiciones electorales mínimas para avanzar en el proceso, pues está convencido de que no habrá unidad opositora.
Sobre el levantamiento de sanciones, al menos por ahora, no necesita que sean masivas, sino algunas claves que le permitan tener margen de maniobra en la operatividad de Pdvsa; y es allí cuando esto se convierte en algo más relevante que incluso la puesta en marcha de un fondo social.
Aquí se trata, agrega el semanario, de la sobrevivencia de un proyecto político y de tratar de sentar algunas bases que le permitan a él ganar para un tercer periodo.
Está claro para Maduro que en este momento la única manera de revertir la caída de la economía es obteniendo mayores recursos y eso sólo puede lograrlo con una negociación mínima en la que Estados Unidos y Europa estén involucrados, señala el semanario.