Desde octubre de 2020 en las principales farmacias de Venezuela se distribuye una copa menstrual que tiene como objetivo que las mujeres se conecten con su cuerpo. Sin embargo, esta iniciativa no se queda en los centros de distribución, sino que se sumerge en las comunidades vulnerables y encara un problema de falta de recursos y de educación que existe en el país frente a la menstruación.
Este emprendimiento que nació en pandemia tiene por nombre Ama Cup y ante la falta de acceso a la higiene menstrual ha distribuido hasta la fecha alrededor de 2.000 de sus copas en el territorio nacional. Una donación posible mediante los aliados con los que cuenta.
“Hasta que la mujer no aprenda a conocer su cuerpo, a conectarse con él y a romper todos los tabúes que limitan esta relación con ellas mismas, seguiremos con la cadena de problemas que sacude a las comunidades”, dice Margaret Guerra, creadora de Ama Cup y quien afirma que continúan avanzando para alcanzar a más venezolanas.
Para Guerra esta iniciativa no se concentra solo en donar una copa menstrual, sino también en educar y crear conciencia para responder seriamente a este tema y ciclo que forma parte importante de la vida de todas las mujeres.
Detrás de la idea de promover este producto innovador que, a pesar de la pandemia, llega a los rincones del país, está Margaret Guerra, quien se dedica a la medicina y a la meditación durante su día a día.
“Mi trabajo me ha ayudado a identificar una de las realidades que afecta a las mujeres en su bienestar durante el ciclo menstrual, que es lo poco conectadas que están con su cuerpo y para mí es muy importante que finalmente aprendamos a amarnos durante esos días. También amar nuestra sangre que es fuente de vida. Todo esto nos hará darnos cuenta de lo que realmente somos y valemos como mujeres y, sin duda, lograr sentirlo con una higiene digna, saludable y cómoda”, afirma.
Beneficios de la copa menstrual
“Ama Cup es un dispositivo para la higiene menstrual que viene a cambiar la relación con nuestro cuerpo, nuestro ciclo menstrual y nuestra vida”, así la define su creadora. Explica que el nombre se debe al deseo de que las venezolanas se amen a ellas mismas, a sus cuerpos y a sus períodos.
Esta copa menstrual es la primera hecha exclusivamente para Venezuela, específicamente para Suministros Médicos AMA C.A. La crea una empresa canadiense especializada en productos médicos quirúrgicos de primera calidad. Además, está certificada por la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) y fue aprobada por el Ministerio de Salud venezolano.
“Ama Cup es uno de los métodos más naturales, distintos y simples. Es hecha de 100% silicona grado médico quirúrgico, no contiene elementos químicos ni tóxicos, por lo cual no irrita, ni produce malos olores”, expresa su creadora.
Margaret Guerra enfatiza que las diferencias de Ama Cup con una toalla sanitaria son que la copa recoge entre 8 y 12 veces más líquido, evita los cambios constantes de toallas, además de las manchas y la sensación de humedad. Sumado a ello, elimina el gasto de dinero en material no degradable porque una copa puede utilizarse por 10 años.
Esta copa menstrual, y el esfuerzo de educar frente a la menstruación, surge en años en los que en Venezuela aún es un tabú hablar del tema. Ante esta realidad, el objetivo de su fundadora es lograr con Ama Cup consolidar una comunidad de mujeres despiertas que se apoyen entre ellas y se preocupen por el bienestar de sus pares, que se escuchen y se ayuden. “Y eso ya está pasando desde nuestro Instagram, plataforma que hemos usado de manera educativa y donde muchas venezolanas comparten sus testimonios frente a la copa menstrual”, dice.
El trabajo realizado desde finales de 2020 es descrito por Guerra como “de hormiguita” y a pesar del reto de mostrar un producto desconocido para muchos, indica que el éxito ha estado en la ardua labor que seguirá con o sin pandemia para que las mujeres lo conozcan y entiendan que no es lo mismo sentir cada mes desagrado y rechazo por sí mismas que tener una relación amorosa con sus cuerpos.