Hoy más que nunca los venezolanos queremos un país con verdaderas oportunidades para todos, que nos permitan gozar de calidad de vida y lograr nuestras metas. Como solución a la crisis nacional, los diputados de la Asamblea Nacional nos trazamos una ruta que encamine a Venezuela a la vía de la reconstrucción y desarrollo, exigiendo respeto a la Constitución y el retorno del sistema democrático que sí garantice nuestros derechos fundamentales y libertades.
Sabemos que el camino que elegimos, con valores democráticos, requiere reconocer la pluralidad de pensamiento, aceptar a los actores de la sociedad venezolana y renovar las instituciones del Estado. Así, es en el seno del Parlamento donde hay que debatir propuestas y planes que sean acordes con el acontecer nacional y la reconstrucción de Venezuela, ya que en esta institución hacen vida los diferentes grupos políticos, legítimamente electos, con distintas visiones y respuestas a las problemáticas nacionales.
Por eso, desde cada trinchera hemos dedicado esfuerzos para establecer reuniones y consultas con representantes de la sociedad civil, los diversos partidos políticos y las Academias nacionales. Pero estas negociaciones conjuntas, deben mantener como norte la disposición de las partes para crear acuerdos reales y tangibles, que brinden verdaderas soluciones a los problemas de los venezolanos.
Por su parte, el régimen se niega a aceptar el retroceso y destrucción que han ocasionado con un modelo que implementaron por la fuerza. Siguen negando la crisis humanitaria compleja que sufren los venezolanos, la migración de millones a otros países de la región, el quiebre institucional del Estado y el colapso de la economía nacional. No les conviene reconocer todos los errores que han cometido ni acatar la voluntad del pueblo.
En nosotros reside la responsabilidad de dar fin a la crisis que atraviesa el país y al sufrimiento de los venezolanos. Esta es una oportunidad histórica que definirá el rumbo del país y el futuro de millones. Invitamos al régimen a que acepte los errores que han cometido estos 20 años, que admitan su responsabilidad en el daño que causaron a millones y reconozcan las exigencias de un pueblo que aspira un cambio de modelo. Hay que actuar ahora, para evitar que millones sigan sufriendo.
Siempre hemos demostrado nuestra disposición a trabajar por el país y seguiremos adelante, con el apoyo de los venezolanos, porque en un modelo democrático la soberanía reside en el pueblo. Su participación activa es vital para que los acuerdos negociados que se logren sean aceptados e implementados correctamente. Estamos seguros que nuestra ruta si dará soluciones a la crisis y que solo de esta forma podremos reconstruir la Venezuela que tanto queremos.
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