La vergonzosa desbandada oposicionista debe provocar una sonrisita a los sumisos gobierneros; no obstante el frio que, también, les provoca el creciente apoyo nacional a María Corina Machado, a quien desde hace mucho, he considerado como la mejor opción de la oposición para confrontarse con el chavismo; cosa que lo ha hecho mejor que nadie, cerrándole cara a cara, el pico al mismísimo “comandante infiernauta”.
Atrevidamente, formulan insulsas declaraciones los jefes ilegítimos de partidos políticos desmembrados, caso de las dos Acción Democrática y los dos Copei, “sentando cátedra”, como si fueran autoridades “orbi et orbi”. Y resulta que no se percatan que ya nadie los atiende ni los entiende y, además, se los inculpa de muchas de las consecuencias que padecemos. Los demás partidos políticos hoy por hoy, resultan integrantes de un chiripero de librito, en una confusión como en la torre de Babel. Esta caterva de declaradores se la pasan contando los pollitos antes de nacer, peleándose por quimeras y, por sobre todas las cosas, enviando un mensaje contradictorio al 90% del país que anhela salir de este berenjenal y que adversa la plaga/pesadilla/cínico/militar que es “este desgobierno”.
¿Qué es lo que radica en el fondo de esta manada de torpes?:
Les falta, primero que todo, altruismo.
Para estos momentos de la vida venezolana , EL ALTRUISMO es una virtud tan poco apreciada como la BUENA FE, de parte de la casi totalidad de los políticos DE MAL OFICIO que conforman, casi sin excepción, el “bullpen” de la oposición; y quienes todavía tienen arrestos para criticar a la ineptocracia/corrupta y violenta del chavismo¡!. ¿Y qué decir de proyectos, planes o propósitos?: NADA. Sequía intelectual. ¿Pero entonces, con las actitudes señaladas, que esperan estos “tontolaba”?, ¿Esperan ganar o a lo sumo recuperar la confianza de los venezolanos?, ¿Esperan tener éxito estos para vencer en elecciones?.
Entre los políticos que se salvan de esta descarga, está Andrés Velázquez, a quien considero que goza de buen aprecio nacional, por su sensatez y prudencia y a él, principalmente, dirijo exhortación, porque considero que es capaz de un gesto de ALTRUISMO.
ALTRUISMO está en oposición a “egoísmo”, reseñado por Platón en Leyes, V.731.e: “Empero, hay innato en las almas de la mayoría de los hombres un mal mayor que todos los males … resulta ser siempre el demasiado amor a sí mismo … creyendo siempre deber estimar lo propio por sobre lo verdadero …”.
Pues bien, el chiripero opositor, políticos de pésimo oficio, salvadas las excepciones, se encuentra en un embeleso narcisista y egoísta, que arrastra las posibilidades del país para salir de la lacra que padecemos, por falta precisamente, de ALTRUISMO; o sea, careciendo de impulso interior/moral y simpatía hacia la sociedad, para ponerla por encima del interés personal. Esto los revela, para el poco probable momento en que pudiesen ostentar poder para ser útiles y en vez serlo, con bastante seguridad, derivarían el mandato -como han hecho los “preclaros“ chavistas- para sus satisfacciones personales, a costa del hoy enteco erario nacional.
¿Se puede confiar en los egoístas?.
El “comandante infiernauta” es la prueba: no se puede ni se debe.
Entonces promotora/proactivamente, siendo Andrés Velázquez una persona de peso moral, por su edad y trayectoria, se le exhorta a “dar un paso al frente” y solicitar de esa comunidad “de pretendientes de Penélope”, dar un paso al lado por lo obvio de las circunstancias y sus inútiles expectativas, para que cierren filas unívocamente al lado de María Corina. Seguramente esta iniciativa tendría adherentes inmediatos, creando un único, creíble y poderoso frente opositor.
Pero esa iniciativa opositora debe ir acompañada al menos, de propósitos generales, perentorios/urgentes que se deberían ofrecer a la ciudadanía y que pudieran ser, entre otros: 1.- El llamado INMEDIATO a una constituyente para substituir a la socialista Constitución de 1999, bloqueando radicalmente la reelección presidencial; 2.- Considerando la privatización de los elefantes blancos que resultan ser las empresas del Estado, un oxímoron, porque el Estado jamás podrá ser empresario completamente exitoso; eso no es compatible con sus fines; 3.- Disponiendo una reducción substancial del tamaño del leviatán/Estado; 4.- Configurando un sistema institucional semi-parlamentario, con entes como la Tesorería Nacional, la Cancillería, la Gaceta Oficial, el Instituto de Estadística entre otros, fuera del control directo del Poder Ejecutivo; 5.- Así como la eliminación de las siempre inútiles Asambleas Legislativas de los estados.
Andrés: ¡tienes la palabra!.