María Marte se autocalifica como un vivo ejemplo de una mezcla de culturas a través de la gastronomía. Emigró de su natal República Dominicana a España, donde se desarrolló como chef profesional, cumpliendo el sueño que tenía desde niña.
Afirma que fue muy triste cuando la mayoría de sus compañeros con quienes estudiaba cocina, partieron a Estados Unidos y ella decidió irse a Europa, sin embargo sostiene que de no haberlo hecho no fuese la cocinera que es hoy en día.
Siempre pensé que Madrid era mi destino y por eso estoy encantada de vivir en España y creo que fue Dios quién eligió por mí, precisa Marte.
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