“No han sido tiempos fáciles para la democracia hemisférica”, afirmo Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos, en el foro “Defensa de la Democracia en las Américas”. Y una de las mayores amenazas, en eso coincidieron varios de los panelistas, ha sido el crimen organizado. Advirtieron que el papel de Venezuela, apoyada por China, Rusia e Irán, ha sido clave, ya que mucho del «dinero bolivariano» ha impulsado dictaduras en varios países de la región.
“Que es lo que significa narcotráfico y qué es lo que significa crimen organizado en términos políticos, significa dinero. Es dinero que se bombea al sistema democrático y obviamente que lo perfora como un queso gruyere. Verdaderamente lo hiere fuerte. Por eso, si algo me gustaría hacer más que nada en este mundo es perseguir el dinero bolivariano en cada uno de las campañas del hemisferio, desde Canadá hasta Tierra del Fuego”, aseguró Almagro.
Sin embargo, pidió no confundir “democracias imperfectas, que prácticamente son todas las del hemisferio,” con dictaduras. Explicó que las democracias son imperfectas porque presentan “problemas estructurales”, que resumió en corrupción, violencia, desigualdad y pobreza.
“Tenemos que resolver estos problemas estructurales y si no los resolvemos va a ser muy difícil que mejoren nuestras democracias. Junto a esto vienen las dinámicas de desestabilización. El laboratorio central obviamente es Cuba. De allí ha salido la desestabilización hemisférica por décadas y se encontró en el camino con dinero bolivariano. Eso completamente transformó las posibilidades de desestabilización de las democracias”, indicó Almagro en el evento organizado por el Instituto Interamericano para la Democracia (IID) que se realizó este miércoles 5 de mayo en la ciudad de Miami, Estados Unidos.
En esa misma línea está el planteamiento realizado por Iliana Lavastida, directora del Diario de las Américas, durante su intervención como moderadora del panel «Dictaduras en las Américas». Sostuvo que, además de la “grave salud de la democracia, también debemos pronunciarnos contra la penetración extranjera y el saqueo de las naciones no solo de sus riquezas naturales, también al ultraje de su cultura y a la imposición”.
Recordó que Cuba padeció la penetración extranjera mientras fue “neocolonia o base experimental del socialismo europeo” y hoy lo padece Venezuela con la penetración no solo cubana, sino también de China, Rusia e Irán. “Lo cual incluso implica una amenaza a la seguridad”, aseguró.
“China, Rusia e Irán participan en esto gracias a Cuba”
El abogado y politólogo Carlos Sánchez Berzain, quien fue el orador principal del panel “Democracia y dictaduras de crimen organizado”, reiteró a HispanoPost que “los regímenes de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia, que forman de una asociación transnacional que tiene como instrumento el Foro de Sao Paulo, caen en la descripción exacta de la Convención de Palermo por ser un grupo de delincuencia organizada transnacional”.
El también director ejecutivo del IID aseguró que ese grupo de delincuencia organizada transnacional está liderado por Cuba, que viene cometiendo delitos desde hace 62 años. “Esa forma de delinquir no se ha descubierto en Venezuela, ni es un proyecto boliviano ni es una cosa del sandinismo nicaragüense ni fue una cuestión del correísmo ecuatoriano, es castrismo”.
Sánchez Berzain indicó que ahora se llama castrochavismo porque “el castrismo estaría muerto sino hubiera sido por Hugo Chávez que lo rescató a partir del año 99”. “Lo que estamos viendo en el siglo XXI es la difusión de esas prácticas, teniendo a Venezuela como plataforma y Bolivia y Nicaragua como territorios de expansión”, expresó.
Sostuvo que China, Rusia e Irán participan en esto gracias a Cuba, que es la que controlando a Venezuela, Bolivia y Nicaragua ha abierto las puertas a esas naciones. “Dónde tiene Rusia su principal plataforma, en Venezuela y Cuba, sino fuera por Cuba eso no sucedería. Dónde son los lugares de mayor expansión de Irán, Venezuela, Bolivia y Nicaragua”, advirtió.
“Las inversiones y los manejos en Bolivia son atroces. En la dictadura de Evo Morales han inaugurado la Escuela Antiimperialista del Alba, con la presencia del ministro de Defensa iraní. Están haciendo convenios secretos respecto a los productos que se necesitan para desarrollos nucleares. Todo eso de la mano del castrochavimo”, detalló.
Dijo que Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia “están apoyadas y van a negociar lo que puedan con otros grupos y otros países, obviamente con Rusia, China e Irán, pero el grupo criminal está liderado por Cuba y lo que yo he reclamado es que los gobiernos tengan la decisión de señalar las cosas por su nombre e identificar al adversario”.
“Estamos ante una nueva realidad”
Douglas Farah, periodista y presidente de IBI Consultants, ahondó en las amenazas de las dictaduras de crimen organizado a las democracias de la región en el panel dedicado a ese tema. “Estamos ante una nueva realidad. Siempre hemos tenido crimen organizado dentro de las democracias, pero qué ha cambiado y qué fue el factor detonante para esos cambios. Lo que hizo la revolución bolivariana fue introducir un nuevo modelo, donde los Estados buscan como instrumentos de Estado el crimen organizado y eso es nuevo”, explicó.
Indicó que en los estudios que han adelantado han desarrollado el concepto “empresa criminal conjunta bolivariana”, por lo que consideró “un gran error pensar que son gobiernos normales que funcionan así en aislamiento”.
Farah también consideró que es un “gran error de parte de la política y entendimiento de Estados Unidos” ver lo que está pasando en América Latina como un problema aislado de cada país -entiéndase Venezuela, Nicaragua y Bolivia- y “no entender que es una empresa conjunta, dirigida por gobiernos que ahora aceptan como necesidad la incorporación del crimen transnacional dentro de sus estructuras. Es fundamentalmente distinto a lo que habíamos visto antes”.
Aseguró que esos Estados criminales tienen “apoyos internacionales impresionantes” y entre ellos mismos se respaldan para mantenerse en el poder. “Lo que estamos viendo es que cuando hay sanciones al oro ilegal de Venezuela, lo mueve a Nicaragua, país amigo. De Nicaragua, donde no está sancionado, llega a Turquía y va al mercado internacional”, explicó.
“Muchos han hablado de la deslegitimación de la oposición, de la criminalización de la prensa, pero son cosas premeditadas para cambiar permanentemente las reglas del juego, donde ellos pueden apoderarse del Estado y cuando pierden sus economías legales, como han hecho Venezuela y Nicaragua, pueden reemplazarlas con lo ilegal, que por ser el Estado mismo se vuelve legal en ese Estado”, agregó.
El especialista puso un ejemplo. Explicó que cuando Venezuela decide exportar tres toneladas de cocaína a Irán, “ambos países aceptan que ese cargamento es legal de puerto a puerto, en esa realidad para esos dos países es legal”. “Tenemos una división muy fuerte entre las definiciones no solo de la democracia, sino de la ilegalidad”, apuntó.
Ante ello, plantea la necesidad de reevaluar lo que se está viviendo y cómo analizar las respuestas que puedan dar. “Hablar de Cuba hoy en día como Cuba no tiene sentido para mí. Hablar de Venezuela como Venezuela no tiene nada que ver. Hay que hablar de estrategias de Estados conjuntas, donde ellos pueden cubrir las debilidades cuando ocurren en otros países. Eso es lo que les ha dado fuerza, es por eso que hoy en día Nicolás Maduro sigue en el poder, los seguidores de Castro siguen en el poder y Evo Morales en Bolivia”, puntualizó.
Lealtades al dinero no a las ideologías
El periodista de investigación Casto Ocando durante su intervención afirmó que existe una organización criminal que funciona con una estructura “bastante eficiente y creativa” y que está evolucionando constantemente. “El objetivo fundamental de esa organización criminal es procurar dinero, porque en el fondo estas revoluciones se están sosteniendo con dinero. Por ejemplo, en Venezuela y en otros países son lealtades al dinero y ya no ideológicas (…) Hay una compresión que sin una estructura financiera muy eficiente aquello se viene abajo”.
Añadió que Estados Unidos tiene información sobre cómo opera esa red, que comienza desde Colombia y se traslada a través de diferentes vías. “El cartel de Sinaloa está actuando activamente en Venezuela, en Colombia, en la frontera con Ecuador. Hay lugares donde está coordinando la logística de traslado”.
Ocando indicó que la cocaína que sale de Colombia a un precio estimado en 2.000 dólares el kilo se convierte en una pieza que vale 15.000 dólares en Honduras, un puerto importante de trasbordo, y luego ingresa a mercados como Miami o California, donde el precio es mucho mayor, entre 30.000 y 40.000 dólares.
“Cada día pueden salir uno o dos aviones con 750 a 800 kilos, es una economía formidable. Lo interesante es que sobre todo en los últimos tres años ha habido una ofensiva de las agencias federales de Estados Unidos para ver cómo funciona esto, quiénes son las personas y cómo están operando. Están identificando quién es la persona del cartel de Sinaloa que coordina los vuelos desde el estado Zulia (Venezuela), que tiene 400 pistas ilegales para sacar a aviones”, aseguró.
Denunció que antes utilizaban las instalaciones y empresas de Petróleos de Venezuela en Estados Unidos, pero como la estatal está sancionada están usando otros medios. “Hay agencias que están investigando compañías de carga en Miami y en otros lugares para trasladar el dinero en efectivo y cuando llega el dinero a Venezuela se distribuye a diferentes destinos para lavar el dinero (…) Testigos protegidos han testificado que hay un puente aéreo entre Venezuela y Cuba para trasladar drogas y dinero en efectivo”, expresó.
Hugo Achá, docente e investigador, se refirió a la capacidad de generación financiera. “Un reportaje realizado por CNN el año 2018 demostró que a partir de Venezuela y únicamente teniendo como punto de origen a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia salían 240 toneladas métricas de cocaína a un valor de mercado final de 39,2 billones de dólares. Eso es más que suficiente para financiar todos los movimientos políticos que les hacen frente a los partidos tradicionales y democráticos de nuestra América”.
Recordó que desde hace más de ocho años no se genera información oficial sobre la capacidad de producción de cocaína en Bolivia y que la última vez que se reportó era de 160 toneladas métricas. “De acuerdo con fuentes creíbles, se ha triplicado y quintuplicado en Bolivia. Tenemos que entender por qué Evo Morales es una pieza tan esencial para este esquema a nivel global y despierta el interés de Beijing, Terán o Moscú (…) Esto es a lo que nos enfrentamos. De esto es lo que defendemos a la democracia”.