La economía de Estados Unidos mantuvo su resiliencia de octubre a diciembre a pesar del aumento de las tasas de interés, creciendo a un ritmo anual de 2,6%, dijo el gobierno el jueves en una leve rebaja de su estimación anterior. Pero el gasto del consumidor, que impulsa la mayor parte del crecimiento de la economía, fue revisado a la baja.
El gobierno había estimado previamente que la economía se expandió a una tasa anual del 2,7% el último trimestre.
El aumento del producto interno bruto (la producción total de bienes y servicios de la economía) para el trimestre de octubre a diciembre fue inferior a la tasa de crecimiento del 3,2% de julio a septiembre.
Durante todo 2022, la economía de EE.UU. se expandió un 2,1 %, una baja significativa desde un sólido 5,9 % en 2021.
El informe sugirió que la economía estaba perdiendo impulso a fines de 2022.
El gasto del consumidor aumentó a una tasa anual del 1% el trimestre pasado, revisado a la baja desde un aumento del 1,4% en la estimación anterior del gobierno. Fue el aumento trimestral más débil en el gasto del consumidor desde que COVID-19 golpeó la economía en la primavera de 2020.
El gasto en bienes físicos, como electrodomésticos y muebles, que inicialmente había aumentado cuando la economía se recuperó de la recesión pandémica, cayó por cuarta vez consecutiva.
Más de la mitad del crecimiento del último trimestre se debió a que las empresas reabastecieron sus inventarios, lo que no indica una solidez económica subyacente.
La mayoría de los economistas dicen que creen que el crecimiento se está desacelerando bruscamente en el actual trimestre de enero a marzo, en parte porque la Reserva Federal ha aumentado constantemente las tasas de interés en su campaña para frenar la inflación.
El aumento resultante en los costos de los préstamos ha golpeado a la industria de la vivienda y ha hecho que sea más costoso para los consumidores y las empresas gastar e invertir en compras importantes. Como consecuencia, se espera ampliamente que la economía caiga en una recesión a finales de este año.
El banco central elevó su tasa de interés de referencia nueve veces durante el año pasado. Los formuladores de políticas de la Fed están apostando a que pueden lograr el llamado aterrizaje suave: desacelerar el crecimiento lo suficiente como para controlar la inflación sin llevar a la economía más grande del mundo a la recesión.
Sin embargo, a medida que los mayores costos de los préstamos se extienden por la economía, los analistas generalmente se muestran escépticos de que Estados Unidos pueda evitar una recesión. El principal punto de debate es si una recesión será leve, con daños menores a la contratación y el crecimiento, o grave, con oleadas de despidos.
Mientras tanto, el mercado laboral se ha mantenido sólido, y ejerció una presión alcista sobre los salarios, lo que alimenta la inflación. El ritmo de contratación sigue siendo saludable y la tasa de desempleo está cerca de su nivel más bajo en medio siglo.
La confianza y gasto de los consumidores, que impulsan la mayor parte del crecimiento económico de los EE.UU., sigue siendo relativamente sólido.
El informe del jueves del Departamento de Comercio fue su tercera y última estimación del PIB para el cuarto trimestre de 2022. El 27 de abril, el departamento emitirá su estimación inicial de crecimiento en el primer trimestre actual.
Los meteorólogos encuestados por la firma de datos FactSet han estimado que el crecimiento en el trimestre enero-marzo se está desacelerando a una tasa anual del 1,4%.
Fuente: AP