El arribo del Covid-19 sorprende a Venezuela no solo por la precaria situación en materia de salud, también la crítica realidad económica que se ha agudizado desde 2013, presenta en la actualidad niveles trágicos como inflación galopante, escasez de combustibles y fallas en los servicios básicos de electricidad, agua y telecomunicaciones en grandes zonas como en los andes.
Este es el escenario actual del país de acuerdo a lo manifestado por el presidente de la Cámara de Comercio e Industria del estado Mérida, Gustavo Valecillos Velandia, para quien lo que se vive en la actualidad es un estado de emergencia prolongada, en donde el coronavirus solo puede empeorar más las cosas.
El sector productivo representado por Cacoime, ha presentado a los poderes ejecutivo y legislativo del estado Mérida, una serie de requisitos para seguir operando en las actuales circunstancias, intentando así responder a las exigencias de la región.
Para Valecillos Velandia, no contar con el normal suministro de combustibles en todo el país, aunado ahora el incremento en las fallas del suministro de electricidad que frustran las telecomunicaciones, lejos de contribuir, pone en mayor riesgo la existencia de las empresas que operan el abastecimiento de alimentos y medicinas, entre otros.
Es prioridad también para la Cámara de Comercio e Industria de Mérida, la asistencia a nuestros productores agrícolas y pecuarios, así como a los transportistas, quienes no han recibido respuesta oportuna a sus requerimientos lo que agrava al ya delicado estado de la cadena alimentaria.
En esta difícil coyuntura de emergencia y cuarentena, es indudable el deterioro en los ingresos que está viviendo el empresariado en general, por lo que se ha planteado la flexibilidad tributaria en el pago de impuestos nacionales y municipales, de lo cual no se ha recibido respuesta por parte de las autoridades y en épocas como la de pandemia, hay que hacer el mayor esfuerzo para mantener la supervivencia de las empresas.
Finalizó Gustavo Valecillos manifestando, que nuevamente los comerciantes e industriales de Mérida, exigen a los gobernantes coordinar junto a la empresa privada y a los trabajadores, acciones concretas que garanticen la producción, distribución y comercialización del sector productivo merideño.
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