El CEO de la aplicación Pago Directo, Mark Strasser, explicó que luego del éxito que tuvo la app en el Centro Comercial Paseo El Hatillo, primer estacionamiento completamente digital de Venezuela y Latinoamérica, ahora incluirán una tecnología que funciona a través de cámaras lectoras de placa. Esto como una opción para aquellos usuarios que no cuentan con teléfonos inteligentes y, de esta manera, eliminar por completo el ticket físico.
Explicó que la persona entra con un ticket físico al lugar, se dirige a una de las taquillas inteligentes instaladas dentro del estacionamiento, se registra ingresando su número de placa (registro que se hace una sola vez), realiza el pago a través de las taquillas de autogestión y sale sin el ticket, solamente con la lectura de la placa. Y la próxima vez que ingrese al lugar lo hará a través de la lectura de la placa del vehículo.
“Para esto los estacionamientos no tienen que hacer un gran cambio en su infraestructura o una gran inversión, solo tiene que conectar nuestros módulos, que son hechos en casa, y cuando conectan ese dispositivo inmediatamente se convierten en un estacionamiento inteligente y ya pueden ofrecer los servicios de Pago Directo a todos los usuarios”, especificó.
“Sabemos que esto representa un cambio paulatino, porque no queremos que la gente tenga un impacto o una apreciación negativa de las marcas involucradas, sino que vaya convirtiéndose en algo natural”, agregó.
Nuevas alianzas
Strasser subrayó que Paseo El Hatillo es el primer paso hacia la “Caracas Digital”, porque “también estamos uniendo varias aplicaciones que tienen bastante influencia en la ciudad. Le estamos dando la bienvenida a una alianza que es la familia Ridery, para que muy pronto los usuarios de Pago Directo y de Ridery puedan pagar desde su wallet de Bancamiga.
Especificó que Pago Directo se desarrolla actualmente de la mano de Bancamiga. “Ahorita tenemos 25 estacionamientos, entre los cuales no solo son centros comerciales. Además, estamos en muchas clínicas de Caracas, en el aeropuerto de Maiquetía y en el internacional. También en el Metrópolis de Valencia y, poco a poco, nos expandiremos hacia el interior del país”, apuntó.
Strasser señaló que todo cambio genera impacto y resistencia, pero está convencido y tiene fe en que cualquier usuario que pruebe la aplicación jamás volverá a usar un ticket físico, “que además tiene un impacto ecológico en el planeta, que incluso genera riesgos con la COVID-19 en este momento por tocar botones y hacer colas en taquillas”.
La idea de Pago Directo surgió en un McDonald’s de Nueva York
Comentó que el concepto de Pago Directo surgió estando él en un McDonald’s de Nueva York, ante la dificultad que tuvo para pagar.
“Tuve que esperar un largo rato para pagar, a pesar de toda la tecnología que se maneja en Estados Unidos, y en un McDonald’s con taquillas de autogestión y puntos de venta súper veloces. Entonces, decidí ver cómo podía lograr que el teléfono se convirtiera en el punto de venta, o sea, que no estuviese dentro del comercio, sino que fuera el usuario que tuviese el punto de venta y que se adapte automáticamente apenas entra a cualquier tipo de comercio”, relató.
Señaló que la búsqueda de esa tecnología hizo que consiguieran el bluetooth que extrapolaron luego a Caracas, por la necesidad que vieron ante las colas que se hacían en los estacionamientos al momento de entrar y salir. “Eso hizo que nosotros realizáramos todo el flujo digital de las entradas, el pago y las salidas de los estacionamientos a través de una aplicación que se conecta con módulos bluetooth. De ahí nace Pago Directo, como una solución para los estacionamientos primeramente, y ahora estamos avanzando para buscar soluciones a otros comercios”, apuntó.
Strasser sostuvo que la aplicación de Pago Directo fue puesta a prueba primero en el Centro Comercial Ciudad Tamanaco, en Las Mercedes. “Ese centro comercial fue el primero que nos abrió las puertas para hacer laboratorios de la tecnología, porque es una tecnología que no tenía precedentes en esta área y, al fina,l fue realmente toda una experiencia”, dijo.
Destacó que luego de un año lograron optimizar lo suficiente la conectividad y comenzaron a crecer y brindar el servicio en otros estacionamientos. “La gente no lo conocía mucho, hacía falta mucho mercadeo. En Venezuela el ecosistema no está tan dado para el levantamiento de capital sobre este tipo de empresas. Fue todo un reto, pero lo logramos”, manifestó.