La oferta de los llamados bodegones, que son establecimientos que surgieron a partir del periodo de hiperinflación y escasez severa que vivió Venezuela, se ha ido expandiendo por todo el país. Ahora el abanico de opciones no solo está presente para la clase media alta o aquellos que pueden pagar los precios dolarizados, sino también para los sectores populares, revela el semanario Exclusivas Económicas.
Una fuente extraoficial, que prefirió mantenerse bajo reserva, confirmó a Exclusivas Económicas que ya está andando el primer modelo de negocio diseñado para zonas de bajos recursos. Con los permisos de las distintas alcaldías, un emprendedor venezolano decidió abrir pequeños establecimientos en zonas populares para vender 30 únicos productos como caraotas, arroz y pasta, entre otros.
La idea es que los precios estén al menos 60% por debajo de los marcados en las grandes cadenas de supermercados y abastos, agrega el reporte. ¿Cómo se logra esto? La propuesta es vender por gramos, sin envases ni empaques. Los compradores solo tienen que presentar sus contendores y allí serán llenados con el producto de su preferencia.