La directora de Formación del Ifedec, Mercedes Malavé sostuvo este miércoles que la presión constructiva de la comunidad internacional contribuirá a democratizar a Venezuela, y la Conferencia Internacional sobre el Proceso Político en Venezuela que se llevó a cabo este martes en Bogotá es un buen paso para ello.
En entrevista concedida a Primera Página de Globovisión, Malavé celebró la iniciativa de Gustavo Petro porque durante los últimos meses el tema Venezuela había sido olvidado.
«Siempre hemos estado a favor del diálogo porque es el mecanismo por excelencia de la democracia a través del cual se resuelven los problemas. No hay otra forma de resolver los problemas que no sea por la vía del diálogo» y precisó los tres objetivos más importantes de este encuentro: establecer un cronograma electoral para que haya elecciones libres, sin persecución política, sin ventajismo ni inhabilitaciones; y que estas cuenten con observadores internacionales. Luego el levantamiento de las sanciones; y en tercer lugar, que siga la Negociación de México y que se honre el compromiso del fondo social para resolver problemas urgentes de servicios públicos, sistema eléctrico y educación».
A su parecer, lo más importante de esta última fase son las conversaciones entre el Gobierno de Biden y Maduro. «EEUU quiere garantías de seguridad, petróleo y democracia, que se respeten los DDHH en Venezuela. Por su parte, Maduro quiere levantamiento de sanciones con todo lo que gira alrededor, como la liberación de Álex Saab, quiere ser reconocido y que se den elecciones donde pueda competir, sin sanciones ni bloqueo».
Lamentó que en medio de este escenario, el Gobierno de Maduro insista en añadir una nueva exigencia cuando el diálogo podría reanudarse. «Ahora que estamos en medio de una fase de presión positiva que es la que produce cambios, el Gobierno aumenta los niveles de exigencia y pide cosas como que se archive la investigación de la CPI, que a mi parecer es imposible».
«En Venezuela debe haber un camino de verdadera justicia, reparación de las víctimas que son de muchos colores y para eso el diálogo político, la presion constructiva es necesaria. Las exigencias maximalistas se reducirán a medida de que logren los países vecinos y la comunidad internacional generar condiciones sin amenazas, sin chantaje, pero con un plan serio de democratización y mecanismos de justicia que reparen a las víctimas».
Respecto a la salida de Juan Guaidó, estima que fue el episodio final de una serie de hechos que venían dándose desde finales de 2022 cuando se eliminó el gobierno interino.
«Pareciera que ponerle fin al gobierno interino de Guaidó ha sido uno de los objetivos más importantes de Petro que no está dispuesto a reconocer al interinato; pero no es solo Colombia, sino EEUU a través de la AN 2015 ha ido moviendo las cosas para desaparecerlo. Lo que vimos ayer es la continuación de una serie de hechos y finalizó ayer de una manera misteriosa, extraña, porque parecen una cantidad de declaraciones aisladas, pero es claro que desde diciembre se decidió que esa no sería la estrategia y el Gobierno de Colombia ni de Brasil estaban dispuestos a seguir con esto».
En este sentido, subrayó que lo más importante es que el líder de VP se encuentra a salvo en territorio estadounidense «que se garantizó su seguridad» y agregó «si todo se dio de una forma poco cordial o no, es otra cosa, es lógico que el proceso que trajo tanto descontento, problemas económicos, sociales, políticos, de soberanía, haya dejado heridas y que las cosas se terminaran resolviendo de una manera poco cordial. Pero más allá de eso lo importante es que está en EEUU, cosa que ojalá tengan todos los perseguidos y vulnerados. Queremos que no haya presos políticos ni perseguidos, ni inhabilitados».