Shell Plc tiene como objetivo comenzar a producir gas natural en el campo de gas Dragón de Venezuela y exportarlo a la vecina Trinidad y Tobago en 2026, un año antes de la fecha de inicio original de 2027, según publica Reuters.
La agencia de noticias agrega que el proyecto ilustra las esperanzas de la industria de que seguirá habiendo excepciones a las sanciones de Estados Unidos a Venezuela, a pesar de una aplicación más estricta reciente, al revocar la Licencia General 41 que autorizaba a Chevron operar en Venezuela.
Los socios planean comenzar el trabajo de prospección el próximo mes y han decidido perforar tres pozos, dijeron las personas, y agregaron que necesitarán una licencia estadounidense renovada a finales de este año.
La licencia estadounidense para Dragon se otorgó por primera vez a principios de 2023 y se extendió más tarde hasta octubre de 2025. La Compañía Nacional de Gas de Trinidad aseguró que la autorización sigue en vigor.
«NGC y Shell continúan trabajando arduamente en el Proyecto Dragón y siguen comprometidos a lograr el primer gas tan pronto como sea razonablemente posible», indicó en un comunicado.
El mes pasado, el gobierno de Trinidad dijo que informaría a Washington sobre la importancia de mantener las licencias estadounidenses para desarrollar proyectos de gas con Venezuela por razones de seguridad energética regional.
El cronograma para la primera producción se está adelantando a medida que Shell intenta asegurar el suministro de gas para aumentar la producción de gas natural licuado en el proyecto Atlantic LNG de Trinidad, puntualiza Reuters.
Las sanciones estadounidenses apuntan a prácticamente toda la industria venezolana de petróleo y gas, que está controlada por la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), lo que significa que países como Trinidad y operadores privados que acatan las medidas requieren autorizaciones estadounidenses para exportar o pagar ingresos a entidades sancionadas, incluidos el gobierno, el Banco Central de Venezuela y Pdvsa.