Tulia Monsalve, directora del Grupo Plus Comunicación Estratégica, advirtió que la discusión sobre las comunicaciones actuales no debe basarse sobre si aceptar o rechazar la inteligencia artificial. “La tecnología nos ha ido acompañando a lo largo del tiempo, la discusión no debe ser entre inteligencia artificial o no porque va a estar igual que cuando no sabíamos usar el celular”.
De allí que su planteamiento central durante su intervención este martes 5 de marzo en la segunda edición de la tertulia “¿Cómo manejar las comunicaciones corporativas en la era de la inteligencia artificial?”, organizado por HispanoPost, fuera: “El futuro de la comunicación es más humano”.
La consultora en comunicaciones, relaciones públicas y manejo de crisis, señaló que lo nuevo suele generar temor en las personas, pero se trata de una barrera a superar.
“Ahora tenemos un celular que incluye inteligencia artificial, cuando hablamos de futuro hay una dosis de incertidumbre porque no tenemos la bola de cristal. Si nos preparamos y enfrentamos las cosas eso será por nuestras propias decisiones”, dijo.
Monsalve insistió en que es una reacción normal que “todos tenemos miedo de volvernos obsoletos, eso se incrementa con los años. Enfrenten el miedo. La inteligencia artificial es el copiloto que nos va a ayudar a ganar muchísimas carreras”.
Esta situación la comparó con Sara Fernández, la primera campeona de Europa de Copilotos, y su organigrama de trabajo que lo explica como el manejo de la ruta y la confianza en esta y su copiloto.
“La inteligencia artificial es el copiloto que nos va a ayudar a ganar la carrera”, aseveró Monsalve.
Contar historias
La experta también explicó la importancia de contar historias que conecten con la emotividad, storytelling, para generar nuevas conexiones con la empresa o marca: “Hay que seguir construyendo a punta de mensajes, de storytelling. La identidad es la que va a forjar la personalidad de la empresa, el ADN y el alma de la empresa”.
El ADN y el alma de una empresa, según dijo, debe contar con lo que llamó “las tres C: coherente, consistente y constante en la identidad de la empresa. Con el ADN y el alma vamos a generar un mensaje que nos permita comunicar”.
Por ello, insistió en que la inteligencia artificial debe ser más un apoyo, que el responsable de crear esos mensajes claves. “La inteligencia artificial te manda un texto que no termina de convencerte, entonces, dices: ‘Tomo el primer párrafo, el tercero y el último, ahora vamos a ponerle el sabor caribeño. Ahí es donde entra la emocionalidad, que no lo va a crear la inteligencia artificial’”.
La importancia de la escucha
La consultora en comunicaciones expresó que “el arte de la conversación, de hablar y escuchar, la importancia de las pausas de la comunicación, son fundamentales”, a la hora de conectar como empresa.
Asimismo, Monsalve presentó una serie de testimonios de personas encargadas en las comunicaciones de grandes empresas, dentro y fuera del país, entre los que destacaron los siguientes:
Gretchen Ugas, directora de Comunicaciones de SimpleTV, dijo que “a pesar de que las comunicaciones deben adaptarse, deben transmitir los valores de la empresa y para eso es clave el valor humano que podamos aplicar”.
Por su parte, María Fernanda Polini, estratega en Comunicaciones y Marketing Digital, detalló que “contar historias cargadas de emociones es lo que le permite a la empresa conectar de una manera más rápida con la gente. Por eso veo la tecnología como una gran ayuda para poder lograr los objetivos de una empresa”.
Hola Pierina de Angelis, gerente de Comunicaciones en BAT Colombia, señaló que “la inteligencia artificial apoya siempre y cuando la respetamos, respetemos la reputación de la empresa, porque hoy en día la reputación es el valor más importante de nuestra marca”.
A lo que Monsalve retomó su ponencia para detallar que la “comunicación es vivir en el propósito y el propósito es una de las cosas que reconcilia a la empresa y la sociedad. La escucha es una de las principales maneras de generar confianza en una empresa, por eso muchos piden que los dejen hablar y que escuchen sus opiniones”.
Fotos: Raúl Romero