Benjamín Coronado es un habitante de Tizayuca, Hidalgo, que disfruta el contacto con la naturaleza y escalar las cimas más altas de su país, y planea un día escalar el Kilimanjaro. A pesar de no contar con ambas piernas, el tapicero no encuentra aún límites que le impidan desarrollar la actividad que le emociona, y cuando se le pregunta acerca del cansancio responde «pues si es una chinga (esfuerzo) pero yo siempre llego al final y pregunto ¿Qué, subimos otro cerro?».
Benjamín ha tenido muchos oficios, camionero, machetero, y se estableció en la tapicería «porque aquí puedo estar a la sombrita, a gusto», su taller es reconocido en la comunidad y suele recibir clientes todos los días, manteniendo conversaciones mientras continúa trabajando en un sillón o un cojín. «la verdad allá arriba si se siente bien, se olvida uno de la chamba, de los problemas, de todo…» dice el tapicero para quien las montañas no son un obstáculo sino un reto.
La excursión africana de la que formará parte Benjamín, aún está en etapa de ser fondeada, recibiendo donativos en https://donadora.mx/projects/primera-expedicion-inclusiva-al-kilimanjaro
