Si bien el impacto que tendría la variante delta del coronavirus en la economía todavía es incierto, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) es de la opinión que no reducirá la demanda de petróleo prevista para lo que resta de año y 2022, según una información divulgada por la agencia EFE.
En su informe mensual sobre el mercado petrolero, el cartel aseguró que “la economía global continúa recuperándose”. Sin embargo, aclaró que la evolución de la pandemia de la COVID-19 será “el factor determinante en el ritmo de la recuperación, con la posible aparición de nuevas variantes o mutaciones como riesgo”.
Aunque, según EFE, los analistas del grupo petrolero elevan el crecimiento mundial en,1 % tanto en 2021 (5,6 %) como en 2022 (4,2 %), mantienen sin cambios la demanda prevista para esos dos años.
Según datos del informe, la demanda prevista en 2021 esatría por el ordende 6 millones de barriles diarios (mbd), hasta los 96,6 mbd, mientras que la del próximo año crecerá en otros 3,3 mbd hasta un total de 99,9 mbd, llegando a niveles previos a la pandemia y superando puntualmente en el último trimestre la marca histórica de los 100 mbd por primera vez.
Sin embargo, los analistas de la OPEP no ocultan su preocupación por la expansión de esa cepa más contagiosa en destacados países consumidores de crudo como Estados Unidos, China, Japón y parte de Europa, además de otras naciones de Asia y África, “lo que genera preocupaciones sobre un posible lastre en la demanda”.
Fuente: EFE