Nicolás Maduro, el pasado viernes 19 de febrero, propuso que Venezuela se convirtiera en «seguro suministrador» de gas a México. La insuficiencia energética por la que atraviesa el país azteca tiene que ver con el limitado flujo del combustible, como producto de las bajas temperaturas en el sur de Estados Unidos.
Aseguró que los planes de producción de gas en Venezuela “nos permiten aventurarnos como seguro suministrador”; sin embargo, de acuerdo con el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos, al menos 83% de la población encuestada en doce ciudades del país, durante el mes de enero, usa gas para cocinar y de esa cifra solo 28,2% recibe una bombona de gas cada tres meses o más.
El director de Monitor Ciudad, Jesús Armas, aclaró que la infraestructura gasífera venezolana es insuficiente, lo que impide su distribución y exportación. Explicó que el Complejo Petroquímico José Antonio Anzoátegui, ubicado en Barcelona, estado Anzoátegui, es la única refinería que está manejando un buen ritmo de producción.
“La verdad es que no estamos en condiciones para exportar gas, por dos cosas. Si hablásemos de gas propano, la refinería de José es la que más está produciendo y apenas produce entre 15.000 y 20.000 barriles diarios de gas. Esto no alcanza, y ni hablar de las otras refinerías. Pero si hablamos de gas metano, ahí no tenemos ni infraestructura física. No hay red de tubería para exportar gas licuado hasta México”.
El también dirigente político detalló que “89% de los venezolanos dependen del gas propano, que es el que recibimos a través de bombonas, y hoy no hay suficiente capacidad para cubrir la demanda nacional”.
Armas explicó que la alta demanda y poca oferta de gas doméstico ha impulsado el mercado negro. “Por ejemplo, en La Vega, una bombona de 10 kilogramos de gas está entre 5 y 10 dólares, y si nos vamos al interior del país puede llegar hasta 20 dólares”.
Sobre el gas metano o gas licuado, que es el que se envía por tuberías y el que pretende exportar Maduro a México para aliviar la crisis, indicó: “Hoy estamos perdiendo gas metano, porque se está aireando y no se está quemando, porque ese excedente no hay como enviarlo al interior del país, porque no hay suficiente infraestructura dentro de Venezuela. Apenas Caracas, Zulia y otros estados del norte del país son los que reciben gas por tubería, que es el gas metano”.
Añadió que para poder hacer esa transferencia es necesaria “una interconexión de tuberías con otro país o una infraestructura importante para poder distribuir el gas licuado a otros países”. “Eso se pudiera hacer, eventualmente, con Trinidad y Tobago o Colombia, y allí sí pudiésemos exportar gas metano”, afirmó, al tiempo que señaló que esto podría suponer una inversión “mil millonaria” en tuberías y otras infraestructuras.
Otros servicios
El director de Monitor Ciudad también se refirió a la posible privatización de empresas públicas. “Nicolás Maduro tiene una clara voluntad de empezar a privatizar muchas empresas públicas, ahí se ha corrido el rumor de lo que sucedería con Movilnet. Ya hemos visto como ha venido avanzando en distintas conversaciones, pero además se han venido haciendo a espaldas de los venezolanos, sin transparencia. Se ha hecho a escondidas”.
Armas aseveró que como dirigente político celebra la decisión de la administración madurista de reconocer el valor de la inversión privada en el desarrollo del país: “Se dieron cuenta, después de 22 años, que el socialismo no funciona y que sin la empresa vida no puede avanzar un país. Nosotros creemos en la privatización, yo creo que deberíamos regresar a un modelo como el que teníamos en la Electricidad de Caracas, donde todos los ciudadanos de nuestra Área Metropolitana teníamos un servicio de calidad y que pudiésemos tener lo mismo en las telecomunicaciones”.
Siempre que se trate de negociaciones limpias y francas con los venezolanos, dijo. “No hay razón para que un Estado tenga un control sobre una empresa de telecomunicaciones como Movilnet. Pero para hacer eso, hay que hacerlo de manera transparente y no rematar a Rusia, China, Irán o algún aliado o enchufado del gobierno, las empresas públicas que son propiedad de la República”.
Sobre el suministro de agua potable en el país, Armas aseguró que Falcón es uno de los estados más afectados: “Es el estado más seco del país, donde la gente se está acostumbrando lamentablemente a vivir sin agua y han tenido, desde Caracas hasta en el interior del país, que recurrir a medios alternativos para buscar agua de calidad no certificada en quebradas y en cualquier punto donde puedan comprar agua embotellada. Un botellón en La Vega hoy cuesta un dólar”.
Señaló que en lo que va de año Caracas ha enfrentado al menos 200 bajones energéticos, como producto de las fallas eléctricas. “Lo cierto es que los otros servicios también se han visto impactados, en el caso de la electricidad es el servicio peor evaluado en los estados occidentales del país. Vemos como cada vez hay más apagones en el Área Metropolitana de Caracas. De hecho, hace dos días hubo un apagón de más de cinco horas en El Paraíso y en Caricuao. Esto se va a seguir incrementando, van más de 200 bajones eléctricos en lo que va de año, solamente, en el Área Metropolitana de Caracas. Yo quisiera ver cómo están los estados Zulia, Mérida o Táchira”.