El idilio perfecto entre Lewis Hamilton y la Fórmula Uno podría estar a punto de llegar a su fin. Al menos eso es lo que se especula en el mundo de los motores, pues el heptacampeón del mundo lleva un mes en completo silencio y en absoluta ausencia, luego de lo ocurrido en el Gran Premio de Abu Dhabi, último de la temporada, en el que el británico perdió el título a manos de Max Verstappen en la vuelta final.
Cuando faltaban cinco vueltas para cerrar una carrera que Hamilton había dominado a su antojo, y que lo consagrarían como el piloto más ganador de toda la historia, con su octavo título mundial -y con el que rompería el empate a siete con el legendario Michael Schumacher-, el piloto Nicholas Latifi (Williams) tuvo un accidente que provocó la salida del safety car.
Esto fue aprovechado por el equipo de Red Bull, para cambiar los neumáticos de Verstappen por blandos, y a partir de allí, el neerlandés fue indetenible e implacable. Desplazó sin problemas -en la última vuelta- a su rival directo por el título, que ya tenía mucho desgaste en sus ruedas, y le arrebató de las manos la octava corona de su carrera.
Tanto el piloto inglés, como la propia escudería Mercedes, muy descontentos con lo ocurrido, presentaron dos protestas formales que a la postre fueron desestimadas. Una de ellas fue por un supuesto adelantamiento de Verstappen a Hamilton, mientras estaba en pista el vehículo de seguridad, y otra porque dejaron desdoblarse a varios pilotos antes del reinicio de la prueba.
Desdoblarse se refiere a un permiso que se concede a los corredores rezagados, de recuperar las vueltas perdidas respecto a los líderes, mientras el safety car está rodando. Es decir, estos pilotos a los que los primeros lugares le sacan una o más vueltas de ventaja son los únicos autorizados para superar al carro de seguridad.
La FIA emitió un comunicado informativo y se comprometió con hacer un análisis profundo y -posteriormente- explicar las razones de su decisión de permitir lo ocurrido en pista y de desestimar las protestas del equipo Mercedes. Esto último será entregado en un informe que debe ser publicado antes de que comience la pretemporada 2022, por lo que debe hacer a más tardar la primera semana de febrero.
Muchos afirman que la continuidad o no de Lewis Hamilton, en la máxima competición del automovilismo mundial, está ligada a lo que se comunique en dicho informe, pues el heptacampeón del mundo quedó notablemente contrariado y molesto con lo ocurrido en la carrera. Su desaparición también ha servido para alimentar la posibilidad de que esté considerando colgar el overol y retirarse de las pistas.
Por otro lado, está el hecho de que el británico quiere el octavo título y parece poco probable que se vaya a revertir la decisión de nombrar a Verstappen como el vigente campeón, por lo que si el sueño de Lewis todavía pasa por superar a Schumi, deberá volver a las pistas al menos un año más. Vale destacar, además, que tiene contrato con Mercedes hasta finales de 2023, aunque la escudería a enfatizado que respaldarán a su piloto en cualquier decisión que tome.
El reglamento de la F1 tendrá varios cambios que entrarán en rigor para la temporada que esta por comenzar, misma que tiene fecha de inicio para el fin de semana entre el 18 y el 20 de marzo, en el circuito de Bahréin.
Estos dos tópicos serían los principales argumentos para convencer a LH44 de un “último baile”. El hecho de pelear por conseguir su octava corona y hacerlo en un año con reglamento nuevo, que brindará a la F1 un nuevo nivel de competitividad, al haber mayor igualdad entre los contendientes, por lo que se estima que cuatro o cinco pilotos podrían estar peleando por el título hasta el final de la temporada.
En todo caso, a este punto todo es incierto, por supuesto que la afición quiere a Hamilton en la pista para 2022, claro que la mayoría piensa que eso sería lo mejor para todas las partes; para la Fórmula Uno, para Mercedes-Benz y para el propio piloto que podría quedar en solitario como el más ganador de la historia. No obstante, si el británico decide despedirse, también estará bien sí él va a estar en paz.
A sus 37 años, Hamilton tiene una carrera de 14 años en la F1, llegó en 2007 con McLaren y en 2008 ganó su primer título; fichó en 2013 por Mercedes y en 2014 ganó su segunda corona (la primera con las ‘Flechas Plateadas’), repitió en 2015 para convertirse en tricampeón; en 2016 fue superado por su compañero de equipo Nico Rosberg, pero de 2017 en adelante su dominio fue absoluto.
Con sus fanáticos y sus detractores -como todo gran ídolo-, no cabe duda de que Lewis lo ha dado todo en la pista y no hay nada que reprocharle si decidiera dejarlo, simplemente agradecerle y desearle lo mejor en sus próximos proyectos… amanecerá y veremos.