“Las cuentas no se cobran y el odio no se hereda”

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    El diputado Julio Borges, fundador y coordinador nacional de Primero Justicia, es el presidente de la Asamblea Nacional desde el pasado 5 de enero, cuando fue juramentado por acuerdo de los partidos opositores aliados.

     

    Pero en los últimos 20 años, en los que más intensa ha sido su carrera política, también ha perdido fidelidades. En entrevista con HispanoPost, este abogado de 43 años, cuenta mantiene la mejor relación con Gerardo Blyde y con Liliana Hernández, quienes lo acompañaron en la fundación de Primero Justicia pero que luego abandonaron el partido.

     

    Asegura que tanto él como Leopoldo López –hoy preso y antes inhabilitado políticamente por el financiamiento de la organización que también ayudó a crear- están orgullosos de lo que fue Primero Justicia en sus tiempos de asociación civil.

     

    Se reconoce como un político de los que pasan la página, “las cuentas no se cobran ni se heredan”, confiesa sobre la forma en que habla con sus hijos acerca de los golpes que ha recibido en su paso por la Asamblea Nacional.

     

    “No tenemos miedo a ningún tipo de elección. Para lograr salir del Gobierno tenemos que hacer unas elecciones ya”, nos dijo Borges, quien adelanta que en los 12 meses que estará frente al Poder Legislativo se esforzará por buscar un cambio por la vía del voto. En su opinión el gobierno de Maduro se está convirtiendo en una dictadura.

     

    Aunque aspiró a ser Presidente de Venezuela, nos declaró que se encuentra “tan preocupado por lo que está pasando el país, que sería el peor error y el peor aporte  querer ser precandidato presidencial”.