Panaderías, bodegones y supermercados de Caracas están bajando los precios de los productos navideños, debido a que les quedaron bastantes inventarios por vender.
Comerciantes que solicitaron guardar sus nombres en reserva aseguraron que las ventas en esta temporada navideña no cumplieron con las expectativas previstas.
En ese sentido, los propietarios han tomado la decisión de bajar los precios al público para recuperar «algo» de la inversión.
El 2 de enero, por ejemplo, varias panaderías mostraban rebajas en el precio del pan de jamón a entre 5 y 6 dólares la pieza grande, cuando hasta el 31 de diciembre se vendía cada pan a entre 8 y 12 dólares.
«Hicimos mal el cálculo. Nos quedaron bastantes panes de jamón de la hornada para la cena de Año Nuevo y -antes de que se pongan duros- se vende más barato el pan completo o la porción a 5 y 1 dólar, respectivamente», explicó un consultado en Candelaria.
En San Antonio de Los Altos, otro comerciante refirió que antes del 31 de diciembre preguntó a los clientes sobre cuántos panes de jamón iban a comprar para esa fecha por lo que vendió completamente la hornada gracias a un cálculo más realista.
Liquidaciones de enero
Los comerciantes señalaron que quedan muy pocos días para culminar definitivamente las fiestas, lo cual es sinónimo de una baja demanda de productos navideños.
«Estamos haciendo pan de jamón y roscón de Reyes solo por encargo», avisó a un cliente la dependiente de una panadería en la avenida Urdaneta.
Los comerciantes manifestaron su esperanza de un repunte en las ventas gracias a la tradición del público de comprar el roscón de Reyes y el Bolo do Rey con motivo de la llegada de los Reyes Magos este 6 de enero.
Sin embargo, el precio de entre 7 y 12 dólares la unidad pone a pensar a los consumidores que enfrentan la caída del poder adquisitivo.
«Este año haremos el roscon de tamaño individual para vender la unidad a uno o dos dólares. El año pasado se quedaron muchas roscas grandes sin vender», recordó un comerciante.
Los caraqueños consultados destacaron que pasan por alto el Día de Reyes porque el presupuesto se les agotó en las cenas de Navidad y Año Nuevo.
Rosalba Silva, ama de casa, recordó: “Antes preparábamos un chocolate para acompañar el roscon, pero este año no podrá ser».
Dueños y encargados de bodegones y supermercados revelaron que en estas fiestas el público compró mucho menos, por lo que les quedó mercancía fría.
Ante esta esta situación, agregaron, van a vender en oferta artículos importados y nacionales como embutidos, quesos, frutos secos, paneton, tortas italianas y turrones, entre otros.
«Mucha de esta mercancía caduca en pocos meses por lo que es conveniente salir de ella y recuperar la inversión», refirió un consultado.
Un comerciante comentó con ironía que las tradicionales rebajas de enero de las tiendas de ropa y calzado llegaron a los comestibles y » no por tradición, sino por necesidad».
Pero la reacción de los consumidores consultados es poco entusiasta, pues las limitaciones del bolsillo no les permite aprovechar esas rebajas.