El chavismo, a través del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha insertado en el ámbito laboral a muchos de sus militantes dentro de una nómina paralela, aseguraron fuentes sindicales.
Servando Carbone, coordinador de la Unión Nacional de Trabajadores, destacó que entre 500.000 y un millón de militantes del PSUV forman parte de esta nómina y esas personas se encargan de afianzar en el poder al régimen de Nicolás Maduro.
El representante de la Unete señaló que esos militantes pertenecen a las UBCH, los colectivos, los consejos comunales y de los CLAP (Comités Locales de Abastecimiento y Producción), la Misión Chamba Juvenil, cooperativas, comunas e incluso pequeñas empresas.
«El régimen utiliza estos militantes resteados para abultar sus logros de empleo en un intento de disfrazar la realidad de los elevados niveles de desempleo y de pobreza en la población «, sostuvo Carbone.
Agregó que los «empleos» de la gente del PSUV distan mucho de ser productivos y decentes con remuneraciones de uno o dos salarios mínimos, los bonos del sistema Patria y bolsas de alimentos, además de privilegios por apoyar la distribución de bombonas de gas entre otros servicios.
Parte de esa militancia del PSUV también es requerida para labores de limpieza, jardinería y pintura en la capital (plan Caracas Bella) y otras ciudades como se ha observado los últimos meses con motivo de la celebración del bicentenario de la Batalla de Carabobo.
«Son empleos temporales e improductivos que no obedecen a un plan serio, permanente y efectivo», aseveró Dick Guanique, coordinador del Frente Autónomo de Defensa del Empleo, el Salario y el Sindicato.
El dirigente de Fadess alertó que Venezuela registra una de las tasas más altas de desempleo en el mundo.
Añadió que muchos trabajadores del sector formal se ven obligados a laborar simultáneamente en la economía informal a través del rebusque para aumentar el ingreso familiar.
Guanique indicó que según el informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) el desempleo en Venezuela se ubica en 58%. «Esto significa que el desempleo ataca a más de 6,3 millones de trabajadores de una población económicamente activa o fuerza de trabajo de 11 millones de personas», precisó.
El sindicalista advirtió que la actividad en el sector privado es muy baja, pues las empresas operan a menos de 20% de su capacidad instalada, mientras que las del sector público están prácticamente paralizadas.