Hace ya varios años -desde la salida de Rafael Ramírez- Petróleos de Venezuela (Pdvsa) no es una corporación pública unificada. La gerencia de Comercio y Suministro es territorio aparte y hasta noviembre de 2021 era manejada por el coronel Antonio Pérez Suárez, un militar que obedecía los lineamientos de la primera combatiente, Cilia Flores, revela el semanario Exclusivas Económicas.
No había barco que saliera de puerto venezolano que Flores no autorizara y, según fuentes extraoficiales, el militar y su grupo descontaban para ellos unos centavos por dólar de cada barril que se enviaba al exterior, agrega la publicación.
Debido a las sanciones económicas, desde hace varios años a la petrolera estatal se le dificulta colocar su producto en el mercado y, sobre todo, cobrarlo. Sin embargo, en un principio Rosneft ayudó en esta tarea hasta que fue amenazada con sanciones.
De una y otra manera, Pdvsa en manos de Asdrúbal Chávez y Tareck El Aissami como ministro de Petróleo lograron lidiar con la baja producción que había dejado Manuel Quevedo, pero era Pérez Suárez -quien venía de ser parte de la administración de Quevedo- quien se encargaba de comercializar la mayoría del petróleo, advierte el semanario.
Gran parte de la colocación de cargamentos se hace a través del mercado en Asia y una red muy variada y de intermediarios es la encargada de la compra y trasporte de crudo, indica Exclusivas Económicas. El cobro de comisiones es una alcabala ineludible que afecta el precio final de factura, además del descuento con el que Venezuela tiene que vender su petróleo.
Si ya este mercado asiático era difícil para Venezuela, las cosas se complicaron más cuando estalló la invasión de Rusia a Ucrania. Es ese momento, los bancos rusos a través de los cuales Pdvsa hacía sus operaciones de cobro fueron sancionados.
Joselit, el “gurú” de las criptos
El semanario recuerda que Joselit Ramírez llegó a la Superintendencia Nacional de Criptoactivos (Sunacrip) de la mano de Tareck El Aissami y si bien este mercado ya se utilizaba desde mucho tiempo antes de que estallara la guerra Rusia-Ucrania, es con las sanciones a los bancos rusos que el mecanismo se comienza a utilizar para pagar proveedores (no solo de Pdvsa) y para monetizar en dólares los pagos.
Una fuente que prefirió mantenerse bajo la reserva explicó a Exclusivas Económicas que las denominadas stablecoins, especialmente las USDC que están respaldadas por los bonos del Tesoro de Estados Unidos, son recibidas por los bancos especializados en criptomonedas en Estados Unidos. De allí que Pdvsa podía convertir en dólares las USDC a través de intermediarios.
No obstante, el trayecto del dinero no siempre se cerraba. Muchos barcos desaparecieron en ese mercado sin pagar, los montos totales por venta de crudo quedaban mermados con los pagos de comisiones, los intermediarios cobraban su propia comisión y, además, en noviembre de 2022 explotó la crisis de las criptomonedas y el banco en el estado de California llamado Silvergate Bank, a través del cual se hacían la mayoría de los canjes de USDC a dólares, quebró.
Repunta la inflación y se dispara el dólar
La pérdida de buques petroleros a lo largo de los meses no era un secreto para Nicolás Maduro, pero tampoco había una idea de la magnitud de la situación hasta que la inflación comenzó a acelerarse y se disparara vertiginosamente el dólar. Es allí cuando el Banco Central de Venezuela (BCV) alerta que no tiene reservas para defender al tipo de cambio por los retrasos en la transferencia de fondo desde Pdvsa, señala Exclusivas Económicas.
Una breve auditoría apunta hacia la red de Pérez Suárez y el impago de barcos, dificultades en cobranzas y escasez de recursos. Es cuando Maduro ordena una auditoría y saca a Pérez Suárez del cargo (hoy detenido) y permite que Asdrúbal Chávez presente su renuncia.
Rafael Tellechea, un militar de su confianza y conocido de Tareck El Aissami, es nombrado presidente de Pdvsa y lo primero que ordena es congelar los envíos de crudo a menos que sean prepagados.
Pero la investigación continuó esta vez tratando de determinar la ruta del dinero y es allí cuando comienzan a salir los nombres de un sin fin de intermediarios venezolanos y extranjeros.
Fuentes internas cautelosamente han confirmado a Exclusivas Económicas que el entorno íntimo de El Aissami ha vivido con temor en los últimos meses. Maduro le permitió a Tareck renunciar y no despedirlo, pero sus manos derechas están presos o bajo investigación.
Ante la pregunta de por qué el escándalo ha calado a estas dimensiones, una fuente interna confirmó que las implicaciones son graves por lo complejo de la red de corrupción, pero sobre todo por la deslealtad de un funcionario de confianza.