Alemania es el país de la Unión Europea que ha acogido más refugiados procedentes de países en conflicto, sobre todo de Siria. Solo en 2015, el país registró alrededor de 1 millón de demandantes de asilo, si bien la cifra cayó hasta 500.000 en 2016, fruto de un reajuste en la política de asilo germana.
Una realidad que ha provocado la radicalización y fortalecimiento de movimientos neonazis y fascistas, así como el crecimiento de la extrema derecha.
PEGIDA, que significa Patriotas Europeos en Contra de la Islamización de Occidente, es una organización de corte fascista surgida en 2014 en la ciudad de Dresden, cuna de la extrema derecha y los movimientos islamófobos en Alemania.
Desde entonces, la organización se ha expandido a otros países europeos y con la crisis de los refugiados se ha hecho fuerte en la misma Alemania.
Cada primer lunes de mes, PEGIDA se manifiesta en la ciudad de Duisburg para expresar su rechazo a la entrada de inmigrantes al país, a quienes culpan de la conflictividad social que está teniendo lugar en algunas grandes ciudades de Alemania.
Los asistentes a la manifestación se enfrentan cada lunes con una contramanifestación integrada por movimientos anti-fascistas y gente corriente que apoya la acogida de refugiados.
La policía separa ambos grupos mediante un corredor de seguridad fuertemente custodiado.
PEGIDA vaticina que Europa será destruida en unos años si no se frena la llegada de refugiados e inmigrantes procedentes de países musulmanes de África y Oriente Medio.
