Intención de EEUU de “recalibrar” las sanciones podría reducir el impacto adverso humanitario

- Publicidad -

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos, en un informe que presentó el pasado lunes, indicó que la revisión que hizo a su política de sanciones demostró que “este poderoso instrumento continúa dando resultados, pero también enfrenta nuevos desafíos”, por lo cual busca establecer nuevos mecanismos para hacerla más efectiva.

De allí que asegurara que estaban “comprometidos a trabajar con socios y aliados para modernizar y fortalecer esta herramienta fundamental” y para ello presentó un conjunto de recomendaciones, entre las que destaca la necesidad de “recalibrar” las sanciones a fin demitigar el impacto económico, político y humanitario no deseado.

- Publicidad -

“El Tesoro debe continuar buscando formas de adaptar las sanciones para mitigar los impactos económicos, humanitarios y políticos no deseados en los trabajadores y empresas estadounidenses, aliados y poblaciones no objetivo en el extranjero. Esto protegerá a los electores clave y ayudará a preservar el apoyo a la política de sanciones de Estados Unidos”, señala el informe.

Sobre la revisión realizada por el Departamento del Tesoro, el economista Francisco Rodríguez considera que esto evidencia que en la administración de Joe Biden, en contraste con la de Donald Trump, “hay preocupación por los efectos colaterales de las sanciones, en particular las sanciones económicas, sobre las economías y las personas, especialmente los grupos más vulnerables en los países afectados. No hay interés en dejar de aplicar sanciones, pero sírevisarlas y ver cómo es posible rediseñarlas para disminuir estos efectos”.

Para Rodríguez, quien además dirige la fundación Petróleos por Venezuela, el hecho de que se plantee “recalibrar” las sanciones “abre un espacio para la reconsideración del uso de sanciones en Venezuela” y, a su juicio, lo más importante es que se enfatiza “algo que era una línea de la administración Biden, pero que ahora está más formalmente puesto como política y es la necesidad de intentar tener un enfoque multilateral y colaborar con aliados”.

Destaca que el principal aliado de Estados Unidos, en mucho de estos casos, es Europa, que “no ha impuesto sanciones económicas a Venezuela, no ha impuesto sanciones petroleras, tampoco ha impuesto sanciones financieras, se ha mantenido solamente en el plano de las sanciones personales”.

Ante ello, afirma que esa convergencia que busca Estados Unidos con sus aliados debería ir hacia utilizar más sanciones personales y menos sanciones económicas. Pero aclara que en el caso venezolano “los costos de revertir una decisión de tal magnitud son demasiado altos”.

Asegura que “sería mostrar demasiada flexibilidad frente a (Nicolás) Maduro, lo cual el gobierno estadounidense no está dispuesto a hacer, pero sí creo que esto quiere decir que en el futuro van a tener mucho más cuidado a la hora de poner sanciones unilaterales económicas y siempre van a tratar de buscar coordinación con otros actores, en particular con Europa”.

Y en ese contexto advierte que la recalibración podría más bien llevar a que se hagan excepciones a las sanciones existentes, que van a ir en la dirección de flexibilización y no de imponer nuevas restricciones. “Más excepciones de tipo humanitario, más mecanismos para tratar de reducir el sobrecumplimiento. Puede haber una flexibilización que va en la dirección de reducir el impacto adverso humanitario”, afirma

¿Atornillar más a Maduro?

Francisco Rodríguez sostiene que hasta ahora las sanciones de Estados Unidos “no parecieran haber hecho una contribución mayor al cambio político” en Venezuela. Ve al gobierno de Maduro “más consolidado, más aferrado al poder” y “haber podido enfrentarse a las sanciones y mantener el poder y el control de la economía le ha permitido fortalecerse políticamente”.

“Se puede decir que Maduro le está dando la vuelta a las sanciones, las está eludiendo”, indica el especialista y esto ha hecho, según su opinión, que la economía venezolana se haya vuelto mucho más dependiente de países como China e Irán. “Ahorita estamos mandando esencialmente todo nuestro petróleo a China. Entonces, ahí hay un cambio clarísimo en la dependencia económica de Venezuela”, asevera.

De hecho, especialistas han asegurado que el régimen de Maduro se volvió un experto en violar las sanciones. “Es sorprendente cómo Venezuela ha mutado para superar las dificultades derivadas de las sanciones, lo que hace que el comercio petrolero de Venezuela sea cada vez más opaco”, dijo el mes pasado Francisco Monaldi, director de la Iniciativa de América Latina del Instituto Baker e investigador de la Universidad Rice, a la agencia de noticias Reuters.

A fin de incrementar la producción sin la colaboración de sus socios minoritarios en las empresas mixtas debido a las sanciones, Petróleos de Venezuela armó una red de proveedores de servicios con compañías locales, desconocidas y con prácticas ambientales y operacionales dudosas.

De hecho, Reuters advierte que desde que Estados Unidos incluyó a Pdvsa en la lista negra a principios de 2019, muchos clientes importantes le dejaron de comprar. Pero, en su lugar, “una serie de empresas misteriosas recientemente formadas sin experiencia petrolera previa se han materializado para comprar el petróleo de Pdvsa, incluidas empresas mexicanas y rusas previamente desconocidas”.

Patricia Ventura, directora regional de Relaciones Públicas y Gobierno de IPD Latinoamérica, aseguró en un foro del Atlantic Council realizado recientemente que las exportaciones petroleras de Venezuela son “totalmente opacas”.

Dijo que en julio tan solo en el Puerto de Jose, estado Anzoátegui, se exportaron 300.200 barriles por día y casi 91% de ese volumen se lo llevó empresas que no se conocen, que están recién creadas. “Todos los tanqueros que se llevan crudo de Venezuela viajan con el sistema satelital apagado, con nombres falso”, aseguró.

Tal aseveración es respaldada por Michelle WieseBockmann, analista de transporte y energía y editora de mercados de Lloyd’s, cuando en su cuenta de Twitter publicó una imagen en la que se señala: “En meses recientes medios y agencias de investigación han advertido que las sanciones de Estados Unidos contra las exportaciones de crudo de Venezuela e Irán han traído como consecuencia un mercado paralelo donde el crudo sancionado es negociado activamente. Los barcos involucrados navegan fueran de las normas IMO, frecuentemente operan sin seguro y desobedeciendo las regulaciones de seguridad que el resto de la industria debe acatar”.

La experta concluye que el crudo sancionado por Estados Unidos está “ahora a una escala tan grande que distorsiona el mercado mundial del petróleo, perjudica las tarifas de flete de los buques tanque y desplaza el petróleo que cumple con las normas”.

Las otras recomendaciones del informe

El día de la presentación del informe la secretaria del Tesoro, Janet L. Yellen, se comprometió a realizar una revisión integral de las sanciones, que dirigió el subsecretario del Tesoro, WallyAdeyemo.

La revisión involucró a exfuncionarios, socios interinstitucionales clave, incluidos el Departamento de Estado, el Departamento de Justicia y USAID, miembros del Congreso, pequeñas y grandes empresas comerciales e instituciones financieras, organizaciones no gubernamentales y los gobiernos aliados y socios en el exterior.

Entre los nuevos desafíos que enfrentan las sanciones, según el informe, se encuentran los crecientes riesgos de los nuevos sistemas de pago, el uso de activos digitales y los ciberdelincuentes, así como situaciones en las que una calibración cuidadosa puede limitar el impacto de sanciones al flujo de ayuda humanitaria legítima a quienes la necesitan.

Además de la recalibración de las sanciones para mitigar el impacto económico, político y humanitario no deseado, las otras recomendaciones incluidas en el informe para reforzar la efectividad del papel del Departamento de Tesoro son:

-Adopción de un marco político estructurado que vincule las sanciones con un objetivo político claro.

-Coordinación multilateral siempre que sea posible.

-Garantizar que las sanciones sean fáciles de entender, ejecutables y, cuando sea posible, reversibles.

“Las sanciones son más efectivas cuando se coordinan y cuando es posible con aliados y socios que pueden magnificar el impacto económico y político. Esta coordinación también mejora la credibilidad del liderazgo internacional de Estados Unidos y los objetivos políticos compartidos de Estados Unidos y sus aliados”, puntualiza el informe.

- Publicidad -

Más del autor

Artículos relacionados

Lo más reciente

Edmundo González Urrutia es el designado por «unanimidad» como candidato de la oposición

Cerca de las 10 de la noche de este viernes, 19 de abril, el secretario ejecutivo de la Plataforma Unitaria Democrática, Omar Barboza, anunció...

OVF: Aumentan las remuneraciones privadas y caen las del sector público

Datos del Observatorio Venezolano de Finanzas correspondientes al primer trimestre de 2024 indican que las remuneraciones del sector privado, referidas a el comercio y...

Chacao promueve la inclusión de personas con autismo y síndrome de down

El Concejo Municipal de Chacao realizó una Sesión Especial para conmemorar el Día Mundial del Síndrome de Down, por iniciativa de la Comisión de...

¿Quieres recibir las notas de mayor interés en tu email?

Comparte con nosotros tu email y te haremos llegar las noticias de mayor relevancia directo a tu correo