La práctica de la compra y venta de billetes de dólares deteriorados llegó a Caracas como una forma más de intercambio de la moneda estadounidense, aseguraron fuentes que solicitaron guardar sus nombres en reserva.
Aseguraron que esos billetes son vendidos a intermediarios que los trasladan a las ciudades fronterizas, como Cúcuta, donde las casas de cambio y comercios los aceptan sin problemas.
«Este papel moneda es rechazado por los establecimientos formales, pero tiene acogida en un sistema mediante el cual los dólares terminan llegando a Colombia, donde los comercios no son tan quisquillosos sobre el estado de las piezas como ocurre en Venezuela», explicó un consultado.
La fuente indicó que mientras muchos comercios caraqueños exponen el cartel: «No se aceptan dólares deteriorados”, y las casas de cambio y las agencias de bancos del Estado y privados tampoco los aceptan, en la frontera colombo-venezolana ese dinero se intercambia sin problemas.
«Desde que se impuso la dolarizacion en Venezuela, la compra y venta de los billetes deteriorados se fue extendiendo por las principales ciudades del país. A Caracas llegó más tarde, fundamentalmente a partir de la pandemia de la COVID-19», añadió.
Por su mayor uso y manipulación, los billetes que suelen deteriorarse más son los de 1, 5, 10 y 20 dólares y, precisamente, estas piezas son las más transadas por los cambistas.
Según las fuentes, la condición para aceptar el billete dañado es que se pueda leer claramente su número serial y fecha de edición.
«En el edificio vive una persona que compra esos billetes y los paga a un cambio, incluso más atractivo que el oficial», contó un vecino en Candelaria.
Asimismo, en las calles del centro caraqueño varios puestos informales de mercancía aceptan indistintamente billetes de dólares en buenas condiciones y deteriorados.