La Misión Internacional Independiente de determinación de los hechos sobre Venezuela denunció que las investigaciones en el país concernientes a derechos humanos son limitadas.
Durante un diálogo interactivo, la presidenta de esa instancia, Marta Valiñas, recordó casos como el del concejal Fernando Albán o el del capitán Rafael Acosta Arévalo: en ambos se realizaron investigaciones pero estas solo se dirigieron a autores materiales de bajo nivel.
Por lo tanto, la misión ampliará sus investigaciones “a las responsabilidades más altas de la cadena de mando y presentaremos nuestras conclusiones a este consejo en septiembre de este año. También estamos explorando los intereses que pudieron haber concurrido como motivación de estas violaciones y delitos”.
La instancia, continúa Valiñas, también documentó carencias en cuanto a atención médica para las personas detenidas. Tal es el caso del general Raúl Isaías Baduel, fallecido en la cárcel, o el de Emirlenes Benítez, sometida a torturas en la Dgcim de Boleíta y quien actualmente está postrada en una silla de ruedas.
Otra preocupación son los traslados a la Dgcim de Boleíta, como ha ocurrido con Javier Tarazona, director de Fundaredes, que ha sido víctima de tortura blanca.
“Esta Misión está preocupada por la situación de Orlando Moreno, quien luego de su liberación denunció ser víctima de tortura. Su caso fue llevado a juicio. Nos preocupa que este sea un caso emblemático que muestre la falta de independencia del sistema judicial”, expresó Valiñas.
Añadió que· hoy la vida cotidiana de los venezolanos y venezolanas sigue afectada. Han soportado una década de profundización de una crisis y violación de derechos humanos. Lo que se ha visto agravado por la pandemia”.
Fuente: El Nacional