Limitar el financiamiento del gasto público deficitario del Banco Central de Venezuela debería ser el norte para controlar la inflación en el país; a juicio del economista Pedro Palma.
El también magister en administración de negocios y PH.D. en economía considera que el Gobierno se ha dado cuenta de que debe reducir la inflación, pero tiene pocas herramientas para controlarla.
Palma recordó que uno de los principales generadores de hiperinflación fue la creación de dinero para cumplir con el gasto público.
«Mientras se mantenga una presión inflacionaria tan alta como la que existe en Venezuela, pretender ajustar los salarios por encima de ese aumento de precios es impensable» añadió.
Explicó que para romper ese espiral en el que está el Gobierno se debe aumentar la producción y los niveles de actividad económica.
«En 2022 el gobierno intentó anclar el tipo de cambio con la intención de generar un factor de reducción o disminución de presión en los precios, sin embargo, eso es insostenible y el Estado no dispone de la cantidad de divisas para mantener el tipo de cambio» acotó.
El economista advirtió que para mantener el anclaje del tipo de cambio se necesita, por un lado muchos dólares para tener alimentado el mercado cambiario y una restricción de la cantidad de bolívares que se pueden canalizar en ese mercado cambiario.
Resaltó que en Venezuela circulan dos monedas: el bolívar y el dólar, destacando que la moneda fuerte desplazó a la débil y esta perdió su capacidad de compra.
También recalcó que la capacidad de compra del dólar se ha visto afectada últimamente.
Fuente: Mundo UR