Fuentes sindicales que solicitaron guardar sus nombres en reserva aseguraron que entre 10% y 15% de unos dos millones de trabajadores del sector público voto en el referendo consultivo sobre el Esequibo realizado el domingo y promovido por el gobierno de Nicolás Maduro.
«En la medida que se acercaba el 3 de diciembre, directores y jefes de los organismos se valieron de todas las presiones y amenazas para garantizar la asistencia de obreros y funcionarios junto con sus familias al referendo», contó un consultado.
Pero, destacó otro consultado, en esta oportunidad los trabajadores de la administración pública decidieron «castigar al gobierno de Nicolás Maduro por congelar el salario mínimo desde hace 20 meses, lo cual ocasiona el estancamiento del tabulador de sueldos».
Las fuentes precisaron que previo al referendo, los sindicatos llamaron a los trabajadores a participar en la consulta de acuerdo con su criterio y voluntad.
«No esperábamos que el ausentismo laboral sería tan alto en el referendo», dijo un consultado.
Denuncian operación castigo
Servando Carbone, directivo de la Federación Nacional de Trabajadores del Sector Público, destacó que el domingo los empleados públicos mostraron su disgusto con el gobierno de Maduro aun asumiendo las consecuencias por no ir a votar.
El representante de Fentrasep, quien voluntariamente decidió votar en el referendo, alertó sobre represalias del oficialismo contra los trabajadores abstencionistas.
En ese sentido, denunció la orden oficialista cruzar la nómina del sector público contenida en la página Patria con el listado de electores del Consejo Nacional Electoral (CNE) para determinar quiénes votaron o no este domingo.
Carbone señaló que entre las represalias oficialistas contra los trabajadores están las jubilaciones adelantadas forzosas y la suspensión de la entrega del pernil navideño, entre otros beneficios.
«La decisión de los trabajadores de no participar en el referendo refleja el disgusto frente a un ingreso insuficiente para cubrir los gastos más esenciales del grupo familiar. Esto incluye los aguinaldos que, para colmo, están siendo cancelados de forma fraccionada», sostuvo.
Carbone señaló que hasta ahora los empleados públicos han cobrado tres de las cuatro porciones de la bonificación de fin de año. En cada porción, los trabajadores han percibido entre 230 y 900 bolívares según el cargo.