La conservadora Vjosa Osmani, aliada del primer ministro, Albin Kurti, resultó elegida por el Parlamento presidenta de Kosovo en la última de las tres votaciones posibles y con el boicot de gran parte de la oposición.
La candidatura de Osmani, una doctora en derecho de 38 años de edad, fracasó en las dos primeras rondas al no obtener el respaldo de dos tercios de los 120 diputados, pero fue elegida en la tercera votación, en la que sólo necesitaba mayoría simple.
De no haber logrado el apoyo en esa tercera votación, la ley establece que se hubieran celebrado nuevas elecciones parlamentarias, sólo siete semanas después de los últimos comicios anticipados.
Los diputados de todas las minorías, menos la serbia, y de la opositora Liga Democrática de Kosovo (LDK) proporcionaron el quórum necesario durante la votación, mientras que el resto de la oposición boicoteó la sesión.
Influencias políticas
La elección de la presidenta era uno de los mayores retos que el Gobierno, formado el pasado 22 de marzo por el izquierdista y nacionalista Kurti, se había planteado para dar estabilidad política a un país inmerso en una constante incertidumbre.
Osmani es, junto a Kurti, una de las figuras políticas más populares del país. Su enfoque político es la lucha contra la corrupción y el crimen organizado, y a favor la judicatura independiente de influencias políticas.
Fuente: El Periódico