El año pasado los alquileres representaban 49% y las ventas 51% y en 2024 es completamente lo contrario: 51% alquileres y 49% ventas de viviendas. “Es un crecimiento de 2 puntos porcentuales con respecto a los alquileres, en comparación con el año pasado», aseguró el presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, Roberto Orta.
Enfatizó que los alquileres de viviendas se han incrementado, principalmente, por el aumento del pago de condominios, que ya se cobra en dólares o indexados a la tasa del Banco Central de Venezuela (BCV).
«Los gastos de condominios de los edificios en los últimos años han subido, se han dolarizado y muchos propietarios que tienen los apartamentos desocupados, los que se arriesgan, porque en realidad sigue siendo un riesgo alquilar por la falta de seguridad jurídica que propicia la Ley de Arrendamiento Inmobiliario, toman la decisión y ponen los muebles en alquiler», sostuvo Orta.
De acuerdo con la Cámara Inmobiliaria, el primer trimestre de 2024 estuvo relativamente similar al mismo período del año pasado. «Este segundo trimestre sí hubo una disminución bastante importante en operaciones, por el tema de la cercanía de las elecciones».
Para Orta, «mucha gente está esperando el resultado de las elecciones para concretar negocios o tomar alguna decisión de tipo inmobiliario».
Asimismo, apuntó que en 2023 hubo un incremento de 5% en algunas regiones y en algunos rubros inmobiliarios. «Pero no es una cifra general, porque depende de la zona, incluyendo las capitales, aunque es un incremento leve pero bastante significativo después de tantos años de caída».
A su juicio, el movimiento de alquileres y ventas, tanto de viviendas como de locales comerciales, depende de la zona y estado del país en el que se ubiquen, aunque siguen siendo las principales capitales en las que se reportan un mayor porcentaje de operaciones.
«Las cifras hay que verlas por regiones. Nosotros lo que percibimos es que la movilización interna que hay en Venezuela, que según la encuesta Encovi es de 2.000.000 de personas, es la que ha hecho que algunos mercados suban levemente y otros que disminuyan levemente», comentó Orta.
Agregó que hacia las principales capitales del país: Valencia, Caracas, Barquisimeto, Lechería, San Cristóbal, entre otras, que son donde hay una mejor dotación de servicio regular, de combustible, electricidad y agua, «hay mayor cantidad de operaciones inmobiliarias», mientras que «en las que no hay mayor cantidad de dotación de esos servicios, hay disminuciones en las operaciones inmobiliarias».
Reforma de leyes
El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela resaltó que los retos del sector principalmente están relacionados con el tema legal, por lo que insisten en la necesidad de las reformas de las leyes que regulan la actividad.
En ese sentido, detalló que hace dos semanas la Cámara Venezolana de Construcción y la Cámara Inmobiliaria de Venezuela sostuvieron una reunión con el ministro de Hábitat y Vivienda, Ilderamo Villaroel, en la que plantearon atender esta solicitud.
Aseveró que es fundamental reformar la Ley de Arrendamiento Inmobiliario de Vivienda y Ley de Reglamento de Vivienda «para potenciar el mercado, que es lo más importante o lo que mayor impacto tendría, porque esos miles de apartamentos que están desocupados por la diáspora saldrían al mercado en alquiler».
También solicitaron la reforma de la Ley de Estafa Inmobiliaria que ,según Orta, «es una Ley que regula las preventas en construcción y afecta muchísimo al sector privado; sobre todo, viviendas de clase media, las cuales prácticamente se paralizaron por esa ley».
Ley del Deudor Hipotecario es otra de las leyes que el sector pide que sea reformada, debido a que no permite establecer hipotecas en dólares sino únicamente en bolívares, que es la moneda de curso legal.
«Creemos que la banca no podría dar préstamos hipotecarios hasta que no se reforme la Ley del Deudor Hipotecario, al igual que los particulares que pudieran dar créditos directos al comprador, que no se permite en moneda extranjera y como se sabe, por la inflación, no es factible dar créditos en bolívares», enfatizó Orta.