La mañana de este lunes 22 de marzo de 2021, la Comisión Permanente del Episcopado Venezolano ha publicado un comunicado sobre el derecho a la vida, titulado Grandes Valores Humanos, “ante la real posibilidad de imponer, por parte de una minoría, todo un nuevo ordenamiento legal que trastoque el sentido de la vida y se implante una nueva dimensión de la cultura de la muerte entre nosotros”.
“La Iglesia Católica reafirma en todo momento que todo ser humano debe ser respetado en su dignidad, de donde brotan sus derechos, en especial el más fundamental de todos, como lo es el derecho a la vida. Por ello, sostiene siempre “el valor sagrado de la vida humana desde su inicio hasta su término, y afirma el derecho de cada ser humano a ver respetado totalmente este bien primario suyo. En el reconocimiento de este derecho, se fundamenta la convivencia humana y la misma comunidad política. Los creyentes en Cristo deben, de modo particular, defender y promover este derecho”, sentencian.
Los altos prelados exhortaron a los venezolanos a estar muy atentos con este nuevo marco jurídico que se pretende imponer en el país y a levantar su voz de protesta de ser necesario.
“A todos los fieles católicos y personas de buena voluntad, los invitamos a hacer sentir su voz y a unir esfuerzos en todos los sentidos para impedir que estas leyes se aprueben en nuestro país”, expresan en el comunicado.
Advierten que en nuestro país, “varios grupos y movimientos se hacen eco de esta mentalidad contraria a la vida. Lamentablemente, han ido encontrando terreno fértil en algunos dirigentes de diferentes tipos de ideología política quienes han venido impulsando, desde hace algún tiempo, la posibilidad de promover leyes que aprueben ese tipo de acciones. Incluso, aprovechando que todos estamos abrumados por la pandemia del Covid-19, anuncian y promueven consultas, estudio y aprobación de proyectos de leyes tendientes a favorecer la eutanasia y la ideología de género. Con esto, se abren las purtas para lo que llaman la despenalización del aborto”.
Recuerdan que el sentir del pueblo venezolano, amante de la vida, se expresa en la Constitución Nacional y el ordenamiento jurídico venezolano.
“En Venezuela, siempre se ha cuidado y defendido la vida humana desde el instante de su concepción hasta el momento de la muerte natural. También se ha promovido la unidad de la familia y la dignidad de los seres humanos, creados por Dios a su imagen y semejanza, varón y hembra (Cf. Gén. 1,27). Y se mantiene la naturaleza del matrimonio entre un hombre y una mujer. (Const. Nacional, art. 77) Hoy, de nuevo, ante la real posibilidad de imponer, por parte de una minoría, todo un nuevo ordenamiento legal que trastoque el sentido de la vida y se implante una nueva dimensión de la cultura de la muerte entre nosotros, elevamos nuestra voz de alerta en defensa de esos grandes valores humanos”.
Finalmente, a los miembros de la Iglesia en Venezuela, sacerdotes, consagrados y laicos, invitan a “continuar realizando acciones de concientización en medio de la población”, con “decisión y perseverancia”, que estén “orientadas a impedir la aprobación de aquellas leyes que, alejadas de la centralidad de la persona, terminen imponiendo una cultura de la muerte, alejada de nuestra fe y de nuestro sentir solidario”.