Hebe de Bonafini murió este domingo 20 de noviembre a los 93 años. Vivió una tragedia personal: la desaparición de sus dos hijos y la de su nuera, a manos de la dictadura de Jorge Videla. Convirtió ese dolor privado en un dolor colectivo, y fue así como liderizó el grupo Madres de Plaza de Mayo.
En el diario argentino El Clarín, el periodista Miguel Wiñazki menciona algunas contradicciones que la convirtieron en un personaje muy polémico. Como por ejemplo, pasar de conformar un grupo de madres cuyos hijos fueron desaparecidos por la dictadura, para luego acercarse a líderes de izquierda acusados de violar derechos humanos en sus propios países. Hasta ser incluso investigada por desvío de fondos y corrupción.
Asegura Wiñazki en su texto que él vio como unos policías montados sobre sus caballos pegaban e insultaban a Bonafini, para impedirle protestar: «y la vi a a ella, gritar “Vamos carajo”, y atravesarlos, romper esa barrera de palazos inconcebibles pero reales, y llegar a Plaza de Mayo y plantarse el pañuelo en la cabeza y encabezar la ronda contra todas las aberraciones y contra el bestialismo que no la detuvo».
Pero, agrega el autor, y aquí involucra a lo lectores en su reflexión: «Todos lo sabemos, aquella bravura giró y viró hacia una dramaturgia que nos hace llorar: esa macabra sumisión a la política más rapaz, ese delirante regocijo que explicó ante la muerte de miles de personas en el ataque a las Torres Gemelas, esa complicidad e incluso, su coparticipación tan desdichada en la misma corrupción. Encarnó lo macabro y la impiedad manifiesta con sus aplausos a las peores autocracias del planeta, con su innecesaria violencia verbal, con su exacerbación de la militancia en su fase rampante, con las garras de su lengua extendidas para arañar la democracia que, paradoja argentina tan dramática, ella misma ayudó a construir con su coraje. Ya no está, pero está en su dualidad, y en la historia para siempre».
Según detallaron sus familiares, Bonafini falleció cerca de las 9:20am. Había sido dada de alta el 13 de octubre, después de haber estado internada tres días en el Hospital Italiano de la ciudad de La Plata para realizarse controles médicos. Pero en los últimos días debió ser internada nuevamente por complicaciones en su salud, situación que fue mantenida bajo estricta reserva por sus allegados.
Fuente: El Clarín