El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León”, a pocos minutos de conocerse los resultados oficiales de las elecciones del pasado domingo 21 de noviembre, aseguró: “Los resultados del CNE traen pocas sorpresas”.
En su cuenta de Twitter, a las 12:58 de la madrileña escribió; “La participación estuvo dentro de los rangos reportados en las encuestas. El mapa queda fundamentalmente rojo, como se esperaba y la oposición logra tres estados, divididos entre la MUD y la Alianza, también dentro de lo proyectado”.
Aseguró que el resultado es “lamentable para la oposición, pues se definió fundamentalmente debido a la abstención y la división”.
Para León, las “únicas dos sorpresas” -el triunfo opositor en Cojedes y la derrota de la oposición en Lara- se debieron: “la primera a la mayor participación que el promedio nacional en Cojedes y la segunda a la división lamentable y absurda en Lara, que impidió un triunfo que estaba cantado”.
Explicó que el objetivo buscado por la oposición moderada al promover la participación en las elecciones regionales “era validar partidos y líderes para promover cambios en la propia oposición. Resulta evidente que este resultado, muy negativo, no logra ese objetivo”.
El también economista destacó que: “Llama la atención que los únicos líderes opositores que lograron éxito en esta contienda fueron actores tradicionales que provienen de la cuarta República, un golpe importante a las propuestas de renovación generacional”.
Detalló que los resultados dejan a la oposición “multifracturada en tres grandes partes: 1) MUD, 2) Alianza y 3) Gobierno Interino. Sus diferencias evidentes van a producir mucha batalla interna por la conformación de la representación opositora del futuro, incluyendo negociaciones” de México.
León concluye en que “lo más triste es que la suma de los votos de la MUD y la Alianza en todo el país muestra una fuerza contundente contra el gobierno. Unidos hubieran ganado un número significativamente superior de gobernaciones. Un error lamentable”.