La propuesta de otorgar un salario de emergencia a todos los trabajadores de la administración pública, realizada por la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) y otras centrales sindicales del país, si bien ha sido rechazada por dirigentes sindicales por considerar que no resuelve el problema «de los salarios de hambre de los trabajadores», sí es bien vista por el Gobierno de Nicolás Maduro, señala el semanario Exclusivas Económicas.
Fuentes ligadas al oficialismo, que solicitaron mantener sus nombres en reserva, confirmaron a Exclusivas Económicas que la propuesta es atractiva ya que no generaría ningún impacto en los pasivos laborales de los trabajadores y tampoco en las convenciones colectivas que se encuentran vigentes.
“El salario de emergencia es la única opción que está sobre la mesa en este momento; sin embargo, se está estudiando cómo blindar esta figura jurídicamente con el fin de evitar problemas a futuro”, indicó uno de los consultados.
Agregó que “muchos creen que con la recuperación económica el Gobierno tiene dinero para tirar para el techo, pero no es así. El bloqueo económico nos ha hecho mucho daño y como lo explicó el presidente Nicolás Maduro al país dejaron de entrar 98% de los ingresos. Así que debemos ser muy cautelosos a la hora de aprobar el aumento del salario mínimo, porque no es solo aumentar el salario, es una política macroeconómica que se debe modificar”.
Otra de las fuentes aseveró que no habrá ajuste del salario mínimo en el corto plazo. “El Gobierno está sacando sus cuentas y el ajuste del sueldo mínimo, vía salario de emergencia, podría verse materializado entre mayo y junio de este año. Ahorita no hay dinero, no existen los recursos para dicho aumento y no se puede aprobar algo sin tener los recursos asegurados a la mano”, dijo.
En cuanto al monto que se estaría manejando para el incremento salarial, las fuentes coincidieron que sería entre 50 y 60 dólares en el mejor de los casos. Con respecto a las bonificaciones otorgadas por el sistema Patria, aseguraron que se seguirán pagando hasta que Maduro informe sobre el aumento del salario mínimo.
“Los bonos se mantienen porque es una figura que ha ayudado a la gente en esta guerra económica. Uno ve a los sindicalistas despotricando de los bonos, pero los primeros que los cobran son ellos”, cuestionó la fuente.
No descartaron que a través de la Asamblea Nacional electa en 2020, y de mayoría oficialista, se le hagan algunas modificaciones a la Ley Orgánica del Trabajo relacionadas a la metodología y el cálculo del salario mínimo y los pasivos laborales.