Por primera vez en la historia, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) visita Venezuela. Ante las expectativas que giran en torno a su estadía de menos de tres días, HispanoPost entrevistó a quien presidió la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) durante 1983 y 1985, Pedro Nikken.
No se puede esperar que la Alta Comisionada venga a crear una nueva situación política en el país y que le diga a Nicolás Maduro que cese la usurpación, porque eso no le compete.
El abogado destaca que es importante tener en cuenta que cuando está el tema de derechos humanos de por medio realmente no interesa si el gobierno es legítimo o no sino si está en capacidad de violar o proteger los derechos humanos.
En abril, Bachelet aseveró que su oficina no podrá solucionar los problemas humanitarios del país, pues no se encarga de repartir ayuda, ni los políticos, para lo que es necesario negociaciones entre las partes.
Sin embargo, Nikken resalta que el hecho de que Bachelet vega al país marca un precedente en el país: Muestra que el máximo órgano de derechos humanos de las Naciones Unidas finalmente fue aceptado para una visita a Venezuela.
Explica que anteriormente los relatores de la Oficina del Alto Comisionado no habían podido venir a Venezuela porque el gobierno no se lo permitía, ·con la excepción de un solo relator que sí ha venido.
Nikken afirma que el encuentro que tendrá con la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) se debe a que ejerce poder en Venezuela y al ejercer poder está en capacidad de violar o proteger los derechos humanos, independientemente de que se considere ilegítima.
Los resultados de esta visita se verán plasmados en el informe final de Venezuela que será presentado en julio por el Alto Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos como continuación y cierre del ofrecido el 20 de marzo por Bachelet.
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