“Estas anomalías económicas que hay en el país se muestran con mayor repercusión e impacto en las temporadas de alto consumo, como lo son las festividades navideñas, siendo además de justo, oportuno el reclamo de la dirigencia laboral del aumento general de sueldos y salarios”.
Así lo señaló Edgar Zambrano, primer vicepresidente del partido Acción Democrática (AD) en resistencia, quien señaló que es inimaginable, “los milagros” de un padre o madre de familia, mediando ante los gastos de servicios públicos, calzado, vestido, transporte, alimentación, recreación, “y todo lo relacionado con la dignidad de los venezolanos”.
“Desde un trabajador de la administración pública, hasta los empleados del sector privado, han visto reducida su capacidad de compra, representando este hecho una involución catastrófica en sus niveles de vida. Ocasionando un drama para la familia venezolana, limitada a mecanismos de sobrevivencia que superan la ficción, las bonificaciones terminan convirtiéndose en sal y agua, paliativos denigrantes para los dueños de la fuerza del trabajo”, expresó.
Zambrano resaltó que las exigentes demandas ante un “salario paupérrimo”, asociado a la acelerada inflación, inciden directamente en que la sociedad de consumo se debata, entre “la masiva” importación de productos de todo género, y “la escasa eficiencia del aparato productivo nacional, reflejado en la ruina de las zonas industriales de todo el país”.
Violación constitucional
En este sentido, el dirigente nacional socialdemócrata, hizo hincapié que se está frente a una pública y notoria violación del texto constitucional por “el propio Estado, empleador mayor y garante de su cumplimiento”.
“La seguridad social desapareció, sistema de salud, hospitalización y maternidad en ruina total, fenecieron las convenciones colectivas, seguros funerarios, sepultaron las prestaciones sociales, nuestros jubilados con irrisorias pensiones en situación calamitosa, luego de entregar sus mejores días por el país, perdido en medio de una gran oferta engañosa”, puntualizó.
Lamentó además que, como consecuencia de la crisis multidimensional de los últimos 20 años, se tenga una “dolorosa” migración de profesionales venezolanos, egresados de las distintas academias, “lo que termina constituyéndose sin duda alguna, en una completa involución en el desarrollo de la nación”.