Estados Unidos y la Unión Europea anunciaron este viernes medidas para reducir la dependencia del bloque europeo del gas ruso. Bruselas garantizará una demanda estable de 50 bcm/ año de GNL estadounidense adicional hasta al menos 2030.
La compra está valorada en más de 140.000 millones de euros, reseñó Banca y Negocios.
“Nuestro objetivo es reducir nuestra dependencia de Rusia. Esto solo puede lograrse a través de nuevos suministros de gas, incluidas entregas de GNL”, explicó la jefa del Ejecutivo comunitario, quien añadió que el compromiso de Washington para aumentar el suministro es “un gran paso en esa dirección”.
La Comisión Europea trabajará con los gobiernos de los Estados miembro para acelerar la construcción de infraestructuras de importación de GNL, para incluir las instalaciones en tierra y los gasoductos relacionados para apoyar las importaciones utilizando buques de unidades flotantes de regasificación, y terminales fijas de GNL.