«El sector reformista del gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana quieren regresar a México», afirmó el periodista y analista político-electoral, Eugenio Martínez, en su videocolumna para HispanoPost.
Agregó que, «aunque la estrategia del chavismo-madurismo es muy clara, lamentablemente del lado de la oposición solo existe incertidumbre sobre la ruta política para el período 2022 2024».
Resaltó que el 23 de enero se cumplieron 3 años desde la aparición en el escenario político venezolano e internacional del gobierno interino de Juan Guaidó, quien en ese momento planteó una estrategia de quiebre inmediato de la coalición gobernante.
Martínez sostuvo que eso provocó que la mayoría de los liderazgos opositores e internacionales se plegarán a esa idea, dejando una sola estrategia de acumulación de fuerzas con elecciones y movilización que había desarrollado desde 2008 la Mesa de la Unidad Democrática.
«El plan era sencillo: cese de usurpación. gobierno de transición y elecciones libres. El plan de la oposición, lamentablemente, se ha extendido durante tres años y es importante resaltar que esa estrategia estaba prevista para ejecutarse solamente en un par de semanas. Así lo ha reconocido la exsecretaria de Estado de la administración de Donald Trump, Carrie Filipetti», subrayó.
En tal sentido, advirtió que la confeción de Filipetti comprueba que la estrategia opositora se acabó en abril de 2019, «con la supuesta movilización militar de ese momento, y a partir de abril de 2019 se ha improvisado sobre la marcha».
Asimismo, destacó que «hoy en día el nuevo plan para México especialmente se circunscribe en torno a lo que haga la plataforma unitaria de Venezuela”.
Sin embargo, a su juicio, esta plataforma “no está funcionando como se esperaba y las causas de este fracaso pueden sintetizarse en dos grandes puntos: la falta de cumplimiento del pacto unitario que se firmó en 2020 para la aprobación de normas claras de resolución de conflicto y toma de decisiones dentro de la plataforma, y lo otro es que la plataforma, en su mayoría, está integrada por factores políticos que comparten la visión de Guaidó, del gobierno interino».
Agregó que la ausencia de voces críticas o propuestas alternativas de la clase política venezolana, e incluso de la sociedad civil y gremios, “hace que entre los decisores en Washington, Miami y algunos países de la Unión eEuropea solo se escuche la idea o la propuesta de Voluntad Popular y del gobierno interino, que a la postre es lo que se ha venido ejecutando desde el año 2019”.
Mientras, añadió, “la oposición no sabe qué hacer en 2022 más allá de la convocatoria de una movilización nacional el 12 de febrero y la amenaza reiterada de Guaidó de aumentar las sanciones si Maduro no acepta negociar».
Por otra parte, señaló que el sector reformista del gobierno venezolano tiene muy clara su hoja de ruta: eliminar la posibilidad de un referendo revocatorio en 2022.
«El chavismo tiene muy claro lo que necesita obtener y lo que puede ceder en México. En el caso de la oposición, lamentablemente, su estrategia es similar al paisaje de un bosque inglé bruma niebla y nada claro en el horizonte», destacó Martínez.
