Las exportaciones de crudo de Venezuela disminuyeron 38% en abril después de que propietarios y clientes de petroleros retiraran de las aguas del país varios buques que esperaban para cargar a medida que se acercaba la reimposición de sanciones económicas estadounidenses, señala la agencia Reuters.
El 17 de abril, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) informó que no renovó la Licencia General 44, otorgada en octubre del año pasado, por el incumplimiento de los acuerdos de Barbados entre el gobierno de Maduro y la oposición venezolana.
Esta fue sustituida por la Licencia General 44A, que dio a las empresas hasta finales de mayo para cerrar las transacciones pendientes con Petróleos de Venezuela o tramitar directamente ante la OFAC licencias individuales.
Consecuencia de ello, según Reuters, es que un total de 37 embarcaciones partieron de puertos venezolanos en abril. Las exportaciones promediaron 545.000 barriles por día (bpd) de crudo y combustible, por debajo de un máximo de 873.500 bpd enviados en marzo y 703.000 bpd exportados en el mismo mes del año pasado, según datos de la firma financiera LSEG basados en movimientos de petroleros.
La agencia de noticias también señala que alrededor de seis superpetroleros han salido de Venezuela vacíos en las últimas semanas después de esperar meses para cargar crudo en puertos operados por Pdvsa.
Los retrasos en la carga y el temor de los clientes de que el período de liquidación concedido por Washington no fuera suficiente para completar las ventas estuvieron detrás de las salidas, según muestran los datos y los documentos de la empresa en los que se basó Reuters.
Además, las entregas perdidas afectaron las exportaciones de Pdvsa a Asia en abril, que cayeron 64% a 206.000 bpd. Los envíos a Estados Unidos aumentaron 34% a 238.000 bpd, impulsados por una mayor producción y exportaciones de empresas conjuntas entre la firma estatal y Chevron, advierte la agencia de noticias.