El Gobierno de Nicaragua sigue perpetrando graves violaciones sistemáticas de los derechos humanos, equivalentes a crímenes de lesa humanidad, por razones políticas, aseguró un grupo de expertos.
Durante 2023 hubo un aumento exponencial de violaciones que buscan “incapacitar cualquier tipo de oposición a largo plazo”, dijeron los expertos al presentar su informe.
“El presidente Daniel Ortega, la vicepresidenta Rosario Murillo y los funcionarios de alto nivel identificados deben ser sometidos a investigaciones judiciales por su posible responsabilidad en los crímenes, violaciones y abusos”, afirmó el presidente del grupo de expertos, Jan Simon.
El informe señala que la persecución por parte del Gobierno de Nicaragua de opositores reales o personas percibidas como tales se ha vuelto más sutil. Se perpetran violaciones, abusos y crímenes no sólo para desmantelar los esfuerzos activos de la oposición, sino también para eliminar todas las voces críticas y disuadir a largo plazo.
Además, “la persecución se extiende más allá de las fronteras de Nicaragua” al privar a los opositores de nacionalidad y persona jurídica, no facilitar documentos oficiales o apoyo consular y otras medidas que impiden la reunificación familiar y afectan ampliamente las condiciones para subsistir”.
Fuente: ONU