El panorama de incertidumbre de Monómeros Colombo Venezolanos se complica con la condición del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, de que Venezuela debe proporcionar la materia prima para las operaciones de la filial de Pequiven en el vecino país.
Fuentes allegadas a la industria petroquímica, que solicitaron guardar sus nombres en reserva, aseguraron que la condición expresada recientemente por Petro es difícil de cumplir en lo que respecta al gas natural y la urea producidos por Pdvsa Gas y Pequiven.
«Ninguna de estas dos empresas está en condiciones de proporcionar materia prima e insumos debido a que su producción en Venezuela es deficitaria, incluso para satisfacer las necesidades de la demanda nacional», sostuvo un consultado.
Agregó que «está bastante trancado el juego» sobre el futuro de la filial de Pequiven, la cual opera en el vecino país los complejos Libertador Simón Bolívar y Santiago Nariño, localizados en Barranquilla y Buena Ventura.
Fundada en 1967, Monómeros Colombo Venezolanos posee una capacidad para elaborar 1,3 millones de toneladas anuales de productos fosfatados, alimentos balanceados para ganado, caprolactama (nylon) y fertilizantes entre otros productos.
Con su actividad, la empresa cubre 40% del consumo nacional colombiano del sector agropecuario. «Pequiven no está en condiciones de dar materia prima a su filial en Colombia porque lo poco que produce en sus plantas en Venezuela está destinado al sector agroindustrial del país», advirtió una fuente.
Refirió que desviar esa producción a Colombia significaría un mayor desabastecimiento para la agroindustria y los medianos y pequeños productores del campo venezolanos.
Un consultado indicó que otra opción de suministro de materia prima e insumos a Monómeros seria que Pequiven los importe. Sin embargo, esa salida resulta onerosa por los problemas financieros que registra Pequiven.
Desde 2018, Monómeros Colombo Venezolanos está inmersa en un juego político en el cual la oposición venezolana tiene el control de la empresa con el apoyo del presidente colombiano saliente, Iván Duque.
Asimismo, la empresa también cuenta con la protección de la Oficina de Control de Activos (OFAC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos cuyo gobierno reconoce a Juan Guaidó.
Pero observadores políticos y económicos han señalado que la situación de estira y encoge en torno al Monomeros se torna más delicada con el acercamiento ideológico de Petro y Nicolás Maduro.