Las elecciones presidenciales de Chile se definirán en la segunda vuelta del próximo 19 de diciembre entre el ultraderechista José Antonio Kast y el izquierdista Gabriel Boric, candidatos que se impusieron este domingo en las urnas y cuyos resultados marginaron las opciones de centro.
Los comicios confirmaron el ascenso de Kast pronosticado por las encuestas y le llevaron a ser la primera preferencia de los chilenos, con 28,01% de los votos cuando se había escrutado 92,75% de las papeletas, superando 25,64% alcanzado por Boric, quien según la mayoría de los sondeos era el primer favorito pero quien acabó en el segundo lugar de esta primera vuelta.
Kast, exdiputado y abogado de 55 años que en varias ocasiones ha defendido la dictadura de Augusto Pinochet, ni siquiera alcanzó 8% de los votos en su primer intento por lograr la primera magistratura, en 2017, y arrancó la presente campaña por debajo del candidato de la derecha oficialista, Sebastian Sichel, pero acabó arrebatándole el apoyo de los más conservadores.
Boric diputado de 35 años y abanderado de una formación de izquierdas que cuenta con el apoyo del Partido Comunista, presenta un programa radicalmente opuesto en su naturaleza política, económica y social, lo que obligará a los chilenos a elegir entre dos proyectos muy diferentes en el balotaje y a los dos candidatos a buscar apoyos en el centro para ganar.
El presidente saliente de Chile, el conservador Sebastián Piñera, pidió tras los comicios «moderación» y «no polarización», «responsabilidad» y «no populismo», de cara a la segunda vuelta.
Por otra parte, Kast afirmó que el país «merece paz y libertad» y ratificó que no irá «en la ruta de Venezuela o Cuba».
«Vamos a trabajar para recuperar el orden, el trabajo y el progreso… Nos vamos a liberar de la corrupción, el narcotráfico y el terrorismo… No queremos ir en la ruta de Venezuela o Cuba», aseguró ante una multitud de simpatizantes.
Fuente: EFE