Nicolás Maduro, los integrantes del Alto Mando Político de la Revolución y del Alto Mando Militar aspiran a que la comunidad internacional termine por otorgar a Venezuela un tratamiento similar al que ha recibido el régimen de Cuba: mantener el poder y garantías plenas para que se concreten inversiones y negocios en el país, señala Carpediem Comunicaciones en su último informe de Venezuela, política y economía en perspectiva.
La estrategia de Maduro en este sentido es simple: lograr que el tiempo comience a jugar en contra de Juan Guaidó, de la oposición venezolana y provoque una fractura en la percepción de la comunidad internacional en la forma de afrontar el caso de Venezuela, sostiene la firma.
Recuerda que reiteradamente Jorge Rodríguez ha hecho saber a los interlocutores que intentan establecer canales de diálogo con el régimen de Maduro que su disposición a negociar una salida al actual colapso político es total.
La anhelada fractura de la coalición gobernante no termina de producirse. La forma en que el régimen de Maduro se ha cohesionado a partir del colapso de la infraestructura eléctrica les hace suponer que el tiempo comienza a correr a su favor. La estrategia comunicacional durante los días del segundo apagón ha sido clara: normalizar el caos eléctrico que será constante a partir de ahora en la ciudad de Caracas y en las zonas que habían estado protegidas de los racionamientos que se aplican desde hace cinco años, agrega.
Para la oposición venezolana es vital que el caos no se normalice, advierte Carpediem. Por esta razón se adelantaron los anuncios de la Operación Libertad, que tendrá su primera puesta en escena el próximo 6 de abril. La oposición aspira a que el caos movilice a los ciudadanos. En contraste, el Alto Mando Político cree que el caos aumentará la desesperanza y por ende la paralización de la sociedad.
Cualquier negociación en este momento es muy compleja de concretar porque ambos sectores están dispuestos a imponer su plan A: Maduro insiste en recibir un tratamiento similar al de Cuba y la oposición insiste en concretar la salida del poder de Maduro. Sin embargo, en este momento pareciera que ninguno de los dos sectores tiene la posibilidad de derrotar al adversario y de imponer su aspiración. Un punto intermedio en estos anhelos pudiese ser cambiar el orden de los factores del mantra político de Guaidó, comenzando por las elecciones, indica el informe.
No obstante, el principal problema de lograr el cese de la usurpación a través de elecciones sobrevenidas radica en la forma de garantizar que un proceso que debe ser convocado perentoriamente respetará un mínimo de garantías técnicas y políticas que lo diferenciará de los comicios del 20 de mayo de 2018.
Es hora de ir apurado
El revolcón del segundo apagón nacional, con todas las consecuencias personales y políticas que trae consigo al remolque, se ha aparecido con un recado urgente para el Presidente Interino de Venezuela, Juan Guaidó: es hora de ir apurando, considera la firma. Los pasos dados hasta ahora han tenido enorme importancia estratégica; el dirigente opositor ha equilibrado las cargas en el debate de la disidencia democrática, y se ha obrado con acierto a la vuelta de dos meses de pugna, pero ya nada de eso parece suficiente·.
Asegura que Maduro, atrincherado en el Palacio de Miraflores y todavía al mando, ha logrado minar parte de su impacto apresando a algunos de sus colaboradores inmediatos y obrando en beneficio propio. Los estragos que los apagones irresponsables generan sobre la poca popularidad de Maduro, no han modificado en forma evidente la estructura, la posición y los mandos de las Fuerzas Amadas, que contemplan silentes como el país se viene abajo. Tras los apagones subsisten historias sobre desidia, mala gestión y un enorme desfalco a las arcas nacionales.
El informe puntualiza que Guaidó sigue ejerciendo un mandato figurado; imposibilitado de extender su mensaje a la nación y viviendo entre la insuficiencia y el riesgo. Su respuesta personal ha sido presentar la Operación Libertad, un ambicioso plan de movilización nacional para el cual parece contar on el concurso de otros dirigentes importantes, como Henrique Capriles Radonski.
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