Las cifras que maneja la Asociación Venezolana de Fabricantes de Grasas y Aceites Lubricantes (Afalub) indican una caída del mercado de 70% cuando se comparan las cifras actuales con las que se tenían hace 10 o 15 años, indica el semanario Exclusivas Económicas.
“El mercado nacional se ha contraído mucho si lo comparamos con hace ocho años cuando Pdvsa era el principal productor, Shell llegó a tener una planta y, de igual manera, Texaco tenía una importante presencia porque estaba por el orden de los 20 millones de litros por mes”, comenta Antonio Rodríguez, presidente de Afalub.
“La producción nacional se encuentra en alrededor de 55% a 60% del volumen total de los 6 millones de litros-mes y el otro porcentaje faltante está entre 78 y 80 marcas importadas que hay ahorita en el país. En total, en el país se manejan 130 marcas distintas por un estudio que se realizó”, acotó.
La caída fue mayor si se toma en cuenta que en 2020 bajó a 2 millones de litros mensuales, afectado sobre todo por la pandemia del COVID-19, agrega el semanario.
A eso se suma la ausencia de Pdvsa en el mercado de lubricantes, aunque se ha detectado la entrada al país de productos con la marca PDV, pero “hechos en Ecuador”.
Y parte del problema que afrontan las marcas locales es la embestida de las foráneas por la exoneración de impuestos y aranceles, señala Exclusivas Económicas.
“Hace un tiempo hubo una escasez muy fuerte de lubricantes porque Pdvsa, que llegó a ser el principal fabricante, dejó de producir y para el productor nacional resultaba complicado importar porque el principal proveedor de la materia prima era justamente Pdvsa. Ya nos adaptamos, estamos cubriendo un mayor porcentaje del mercado y en este momento tenemos la capacidad financiera”, indicó Rodríguez.