El aparato empresarial venezolano, tan golpeado en los últimos 20 años, ha ido reaccionando a los nuevos incentivos que le permiten continuar operando en Venezuela y se comienzan a ver algunas consecuencias de ello.
Según explica el informe Exclusivas Económicas, con la ventana abierta de las importaciones sin pago de aranceles y el levantamiento del control de cambio y de precios, hay una nueva generación de empresarios que está creciendo de manera sigilosa.
“El sector alimentos presenta un crecimiento que no se veía (a menos que fueran contratos con el gobierno como los de Alex Saab en el pasado). Dos ejemplos de esto son la expansión de las tiendas Río Supermarket en Margarita y la apertura en Caracas, con 42 cajas de pago, de la cadena originaria de Carabobo y Aragua llamada Hiper Líder. Ambos casos son capital nacional establecido hace muchos años y en otros, segunda generación de empresas familiares”.
Detallan que, si bien es cierto que las sanciones económicas de Estados Unidos tienen un efecto de over compliance en los potenciales inversionistas del sector comercial, cadenas como las panaderías Granier de España han buscado aliados en Venezuela para expandirse y ya son dos establecimientos en Caracas.
“Desde hace varios años opera de manera reservada una plataforma de intercambio de ideas que se denomina “empresarios optimistas”, muchos de ellos han sido etiquetados como “colaboracionistas” y boliburgueses, pero la realidad es que tienen empresas activas y que producen.
Detallan además que “es muy probable, además, que en las próximas semanas se dé a conocer una nueva plataforma empresarial que reúne a capitales venezolanos, cuyo objetivo es fomentar la inversión extranjera en Venezuela desde el sector privado. Es un esfuerzo que nace de la necesidad de dar a conocer el mundo de las empresas y los potenciales negocios que siguen en pie y con planes de seguir adelante en expansión y crecimiento”.