La emergencia sanitaria y la crisis económica, como consecuencia de la pandemia de COVID-19, mantiene en niveles críticos la operatividad del sector manufacturero venezolano, de acuerdo con una encuesta flash realizada por la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria) durante los meses de noviembre, diciembre y enero.
Esta medición se viene efectuando con frecuencia mensual desde mayo de 2020. Desde ese mes y hasta enero de 2021, el promedio de industrias operativas en el país fue de 50%, lo que se traduce en 444 empresas activas de un total de 883 consultadas, las cuales, además, han trabajado apenas a 19% de su capacidad instalada.
En lo que respecta al trimestre comprendido entre noviembre de 2020 y enero de 2021, fue evaluado el comportamiento de unos 607 establecimientos industriales de 12 sectores pertenecientes a ocho regiones del país y destacó el hecho de que 28% de empresas permanecieron completamente inoperativas durante ese periodo.
Por su parte, 72% de las empresas que estuvieron activas reportaron una utilización de su capacidad instalada, en promedio, de 22% en noviembre, 20% en diciembre y 16% en enero.
85% de los consultados señala que entre los factores que están incidiendo en la manufactura, a causa del Estado de Alarma por la COVID-19, se encuentran la baja demanda nacional y los servicios públicos, como los que golpean en mayor medida al sector.
Mientras tanto, 70% de los encuestados opina que la radicalización de la cuarentena ha influido también en la baja productividad. Las fallas de transporte, acceso a financiamiento bancario y escasez de materia prima se suman a los elementos que afectan la operatividad de la industria.
En ese orden, 42% de los participantes en este estudio manifestó no haber operado durante todos los días hábiles de este período, debido a que solo lograron abrir sus puertas entre una a tres semanas.
En cuanto a la problemática de escasez de diésel (gasoil), cabe destacar que 78,8% manifestó que durante el período noviembre-enero ha tenido problemas para surtirse de combustible. De hecho, 53% considera que su operatividad se ha visto afectada por la falta de este insumo, mientras que 70% ha tenido casos en los que sus proveedores no pueden entregar productos o prestar servicios por las fallas en el suministro. 66% de empresas solo dispone de diésel para una o dos semanas de actividad.