No es el túnel del tiempo, mucho menos una película de ciencia ficción, Erasmo al 7400 del barrio de Mataderos, se convierte de un momento a otro en un viaje al pasado, con escalas en todas las épocas de diferentes partes del mundo.
Pasajero de la nostalgia o resultado de la «Invasión Retro», Marcelo Chiarello abre las puertas de su casa para que a quien escribe se le caiga una lágrima en pleno reencuentro con su infancia.
Una inmensa colección de figuritas de fútbol son la excusa ideal para que Marcelo justifique «su eterna juventud» y ostente con orgullo el titulo de Mayor Coleccionista de Figuritas «en sobre cerrado» del continente americano.
Una niñez imborrable, el incomprensible fanatismo argentino por los colores de su amor y los inagotables diseños en las postales del fútbol, siempre son buena excusa a la hora de volver al pasado.
«Empecé estampando imágenes de fútbol en piedra y al tiempo me di cuenta que había un mundo poco explorado en el mundo del fútbol, las figuritas en sobre cerrado», Marcelo, expone los inmenso biblioratos que albergan sus mas de 2000 sobres de todas partes del planeta, «Tengo de Japón, de China, ediciones de los cinco continentes, estoy en contacto con coleccionistas de todas partes del planeta», si bien el argumento globalizado justifica la colección, pasa a segundo plano cuando confiesa que sobre «Estrella» es de fabricación nacional, que de chico tuvo a montones pero de grande tardó años en recuperar «FULBITO, año 1976, el primer sobre de figuritas que recuerdo y que no puedo creer haberlo recuperado».
Grandes coleccionistas, acopiadores sin estilo y grandes o chicos inmersos en una misma pasión que, mas allá de los colores y respetando su fanatismo, se igualan unos a otros buscando «su» figurita difícil.
