Nilda Chiaraviglio, psicoterapeuta especialista en relaciones de pareja, sexología y diversidad sexual, está por primera vez en Venezuela y en HispanoPost conversamos con ella sobre su conferencia “El placer de vivir” y qué tan aplicable es esa afirmación en estos momentos cuando muchas personas sienten que la vida se le pasa a la carrera.
Sobre las expectativas que suelen crearse los ser humanos entorno a las diversas situaciones que circulan su vida, Chiaraviglio destacó: “Me gusta ponerlo de forma muy dramática. Cada vez que tú generes una expectativa estás planeando tu próxima decepción, tu próxima frustración o desilusión porque estamos fuera del presente”.
Insistió en que muchas personas se enfocan en el futuro, cuando la tarea es vivir el momento. “Estamos fuera del presente. Creemos que la felicidad y que la solución va a estar luego. Entonces, cada vez que ponemos nuestra atención en ‘luego’ es como que luego vamos a lograrlo“.
Idea que ejemplificó con un refrán popular: “Es como aquel dicho popular que dice que ‘el burro sigue la zanahoria, pero la zanahoria siempre está más allá’. Cuando nosotros creemos que vamos a ser felices luego, nos morimos en presente porque no estamos en presente. Despreciamos el presente como el valor de estar vivos. Vivimos muertos, por eso no queremos que la gente se vaya o muera o desaparezca porque en presente no lo vivimos ni disfrutamos todo lo que cada persona tiene de impacto sobre nosotros”.
Reiteró que las expectativas hablan de los incierto. “En presente nos desaparecemos y nos ponemos en un futuro que no existe porque mañana podemos estar muertos”.
El poder de la elección
Asimismo, la psicoterapeuta analizó la importancia que debe darle cada individuo a su poder de decisión en la vida. “Para poder elegir, me tengo que conocer. No hay elección mía que no sea de autoconocimiento… Ya no decido, obedezco, pero además no sé a quién obedezco. Es que así es la vida”.
Recordó que el poder de dibujar el camino que deseas tratar para tu vida está en ti mismo: “Es cierto, así es la vida hasta que tú elijes cómo decides que sea tu vida”.
En cuanto al manejo de la culpa que pudieran sentir quienes creen que al elegir un camino distinto al impuesto le está fallando a alguien más o a un colectivo, aclaró:Es imposible tratar mal a la otra persona. Para que tú puedas hacer algo malo a la otra persona es porque la otra persona está ahí para recibirlo. No son unidireccionales nuestras conductas, siempre tienen que ver con otro”.
Explicó «esto de que yo lastimo a otro corresponden a una soberbia que nos limita muchísimo. Ni tú ni yo ni nadie podemos hacerle daño a otra persona. Sí podemos meterle en dedo en su llaga y a esa persona le puede doler. Y duele si le meten el dedo en la llaga, pero esa llaga precede a esa persona. Si yo soy responsable de mis llagas, no hay manera que el otro me toque y me duela”.
El placer de vivir
Nilda llegó a Venezuela -es su primera visita- el pasado jueves mientras en la ciudad capital caía un fuerte aguacero. Así que la psicoterapeuta resaltó las riquezas de la bienvenida que le dio la naturaleza a su llegada al país: “Hay que disfrutar cada una de las cosas que nos suceden en la vida y esas que son incómodas, que nos duelen o enojan, poderlas transformar en una sabiduría novedosa e inspiradora a su vez”.
Acerca de cómo transformar esas situaciones que podrían parecer adversas, dijo que lo elemental es “tomar decisiones. No existe un solo problema que resista una decisión. Tomo la decisión y no me gustó el resultado, vuelvo a decidir. El único que tiene la potestad de decidir sobre la vida de uno mismo es uno mismo. Entonces, si decidí algo que no me gustó mucho el resultado, pues tomo otra decisión y ya está. Si hacemos más de lo mismo, duele más de lo mismo”.
La conferencia “El placer de vivir” de Nilda Chiaraviglio se realizará el sábado 1 de julio, en el Hotel Eurobuilding de Caracas. Las entradas están a la venta a través de las taquillas de Ticketplate y se espera que sea un evento que dure unas cinco horas aproximadamente, en las que la conferencista ofrecerá consejos y enseñanzas que ya ha puesto en práctica con sus pacientes.
“Me encanta la idea de estar rodeada de todos ustedes. Todos son tan amables, tan dulces, con ese tono que tienen que seduce y que encanta. Realmente es una emoción muy grande para mí el podernos abrazar y mirarnos a los ojos en este compartir en el que todos estamos en el camino a la evolución”, aseveró.
